Domingo, 7 de julio de 2013 | Hoy
TELEVISION › LA EXPERIENCIA DE LA COPA CONFEDERACIONES Y LOS PREPARATIVOS PARA BRASIL 2014
El campeonato que obtuvo Brasil fue también un campo de experimentación con vistas al torneo máximo del fútbol. El 3D, que asomaba como la gran innovación, aún encuentra dificultades. Y Juan Pablo Varsky apunta ciertas cuestiones organizativas.
Por Emanuel Respighi
Desde Río de Janeiro
Alguna vez el gran Roberto Fontanarrosa señaló que la vida era eso que pasaba entre un mundial de fútbol y otro. Más allá de la exageración, aun para los más futboleros, lo cierto es que el mayor acontecimiento de fútbol del mundo suele ser un evento en el que se disputa mucho más que varias decenas de partidos para definir a un campeón. Bastó con ver las protestas sociales que irrumpieron durante la Copa Confederaciones que finalmente obtuvo Brasil para darse cuenta de que el fútbol trasciende los límites del campo de juego, para disparar todo tipo de reacciones en el corazón mismo de la sociedad. Pero, además, el torneo que pone en competencia a los seleccionados campeones de los distintos continentes siempre resulta una suerte de prueba de cara al mundial, que en este caso Brasil organizará en 2014. Un ensayo que sirve, también, para tener una primera aproximación al último avance tecnológico en transmisiones deportivas. Y Brasil no será la excepción.
Los mundiales de fútbol que se diputan cada cuatro años suelen ser, desde hace un tiempo, una interesante medida para observar el avance que las transmisiones deportivas evidencian en materia tecnológica. Si el Mundial de Fútbol de 1978 en Argentina significó el comienzo de las transmisiones televisivas a color (para el exterior), desde 1998 hasta el presente cada campeonato marcó un avance: en Francia 1998, DirecTV abrió la posibilidad de tener canales con audios diferenciados de un mismo partido, mientras que en el pesadillesco (por horarios y performance del equipo de Marcelo Bielsa) Corea-Japón la “novedad” fue la posibilidad de que cada televidente se convirtiera en su propio director de cámaras, con pantallas de mosaico interactivo que permitían escoger la visión de la cámara mediante la que se deseaba ver el partido. El mismo avance de la tecnología llevó a que el formato cinematográfico full screen de 16:9 reemplazara en Alemania 2006 al 4:3, permitiendo ganar un 33 por ciento más de imagen. En el último mundial, Sudáfrica 2010, la televisación del torneo alcanzó la mejor calidad posible para los televidentes, cuando DirecTV –dueño de los derechos de transmisión para la región de los mundiales de fútbol desde 1998– transmitió los 64 partidos en High Definition (HD).
En este proceso tecnológico arrollador, Brasil 2014 parecía ser –a priori– el mundial en el que el 3D (tres dimensiones) iba a terminar por consolidarse. De hecho, la empresa dueña de los derechos transmitió 20 partidos en 3D durante el Mundial de Su- dáfrica 2010. Sin embargo, aunque el desarrollo de los decodificadores de la compañía satelital ya lo permiten, las tres dimensiones para la transmisión de cotejos de fútbol se encuentra en el centro del debate a nivel mundial por estos días. ¿Es la transmisión en 3D la mejor experiencia posible para ver el fútbol televisado? ¿Hay que subirse al inevitable carro de la tecnología, aun cuando su modelo de aplicación no alcanzó estándares de calidad certificados? Esos son los interrogantes que rodean a esa tecnología en todo el mundo. Por lo pronto, la transmisión en 3D del fútbol depende de que la FIFA dé el okey para la producción de un canal en ese formato. Algo que recién se sabrá si lo permitirá o no en la reunión que el ente máximo del fútbol celebrará en diciembre.
“La demora de la FIFA es que está evaluando cómo presentar el fútbol en 3D de la mejor manera posible”, explicó a Página/12 Platáo Rocha, vicepresidente de Desarrollo de Contenidos y Producción de DirecTV Latinoamérica, en la presentación que la compañía satelital realizó durante la Copa Confederaciones. “En los Juegos Olímpicos de Londres transmitimos en 3D algunos deportes, como la final de los 100 metros llanos, y fue una buena experiencia. Algunos deportes se vieron mejor; otros no tanto. Existe un debate alrededor del 3D en relación con el fútbol. Estamos en una transición, en plena búsqueda”, reconoce el ejecutivo. La producción y transmisión en 3D incrementa los costos entre un 30 y un 40 por ciento en comparación con la 2D, al tener que utilizar dos cámaras por posición para entrecruzar las imágenes.
El periodista Juan Pablo Varsky, principal comentarista de DirecTV Sports, no es muy amigo de las tres dimensiones en deportes colectivos. “El 3D para el fútbol es difícil”, dice a Página/12. “La cantidad de jugadores en planos que se abren y se cierran todo el tiempo, la velocidad con la que se desplaza la pelota de un lugar a otro y las dimensiones de la cancha producen cierto mareo a lo largo de los noventa minutos. Distinto es el 3D para deportes individuales, como el boxeo o el tenis, donde la experiencia lo vale. Por eso la FIFA debe estar buscando la vuelta para que el 3D tenga un plus anhelado para el televidente y, así, introducirlo definitivamente en el próximo mundial”, analiza Varsky. Mientras en Inglaterra, Sky sigue apostando al 3D, transmitiendo la Premier League con dicha tecnología, la última noticia en relación con el formato es sintomática: ESPN acaba de anunciar la cancelación de su canal en 3D en Estados Unidos para fin de año, en un claro indicio de que la herramienta que venía a revolucionar la pantalla chica está en crisis. Los argumentos son dos: la falta de eventos producidos en 3D y el desinterés del público por dicho formato, que se tradujo en cifras de audiencia que no cumplieron con las expectativas. Al menos en lo que a transmisiones deportivas se refiere, la tecnología que es furor en los cines del mundo aún no encontró su mejor aplicación para el fútbol.
En este contexto, el Mundial de Brasil 2014 llegará a los ojos de los televidentes argentinos con algunas novedades. Aprovechando que el certamen tendrá una importante presencia sudamericana, con la posibilidad de que vayan seis de las diez selecciones, DirecTV incrementará su cobertura: sumará un canal de “emociones”, en el que desde distintas cámaras se hará un seguimiento personalizado a alguna de las figuras durante los partidos; a la vez que incorporará un canal de audio con una pareja de relator y comentarista neutral, “para evitar que hablen mal de nuestros periodistas”, señaló Rocha, entre risas. Además de los partidos, la cobertura brindará un seguimiento permanente a las selecciones sudamericanas clasificadas, a cargo de periodistas deportivos distintos, reconocidos en cada país.
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.