Es el orden natural de las ficciones: algunas se vuelven comentario obligado en el trabajo mientras otras sufren cancelaciones con las consecuentes incógnitas atragantadas. Más cerca de lo segundo, Golden Boy (miércoles a las 22, por Warner Channel) tendrá su último capítulo pasado mañana, con una salvedad: la historia tendrá su claro final para el espectador. La serie creada por Nicholas Wootton (Prison Break, NYPD Blue, Law & Order) partía de una premisa más que interesante, ya que permitía ver el ascenso de un inescrupuloso y maquiavélico policía llamado Walter William Clark Jr. (Theo James). El protagonista pasaba de la escala más baja a detective de homicidios, ya que los medios lo catalogaban de héroe por haber disparado en el momento y lugar indicados.

Su estructura cronológica era uno de los atractivos del policial. La meteórica carrera era vista desde un flashforward con Clark Jr. convertido en el comisionado más joven de Nueva York a base de una ética más que reprochable. Un protagonista sin empatía y la narrativa algo compleja para el neófito no ayudaron a que la serie despegara. Pero a diferencia de otro proyecto como Flashforward, que también jugaba con las idas y vueltas temporales y finalizó de forma abrupta e inentendible, Golden Boy ofrece la chance de ver la resolución íntegra de la primera y única temporada. Y si mañana se convierte en una serie de culto, podrá afirmarse “yo estuve ahí”.