En una oferta supercompetitiva de canales deportivos, TyC Sports se destaca del resto por algo más que el hecho de poseer el botín de las transmisiones de fútbol argentino y de centrarse preferentemente en los deportistas nacionales. La mixtura de cierto desenfado, humor e información deportiva signa su pantalla como ninguna otra, en un estilo propio que refuerza su identidad entre las señales del género. Club social y deportivo, Orsai a la medianoche y Mar de fondo fueron, probablemente, los ciclos emblemáticos de esa personalidad que quebró definitivamente la postura desabrida que caracterizó al periodismo deportivo televisivo de antaño. Un sello que ahora intentará reforzar Estilo K, el ciclo que hace dos años conduce Diego Korol en las tardes del canal y que desde mañana fue promovido a ocupar diariamente las medianoches de TyC Sports.

Con la idea de lograr que la gente se vaya a dormir informada y con una sonrisa, Estilo K en su versión nocturna no cambiará mucho de la vespertina. “Va a ser un programa renovado desde los contenidos, no tanto así desde el equipo, que se mantiene en su totalidad”, detalla Korol en la entrevista con Página/12. Con Román Iucht y Enrique “Quique” Felman como conductores, Marcos “Bicho” Gómez, Toti Ciliberto, “Pasta”, Marcela Mayoral y Alejandra Fidalme como humoristas, y Homero Pettinato y Mariana Brey como noteros, el magazine retornará en un horario que invariablemente modificará sus contenidos. “La medianoche te permite experimentar y jugar con el humor mucho más que un programa a las seis de la tarde. La medianoche es el mejor horario para un ciclo de TV. Incluso, en lo periodístico, nos va a permitir contar con la información del día ya masticada y analizar los temas deportivos del día después”, detalla el integrante de Los Vergara, el grupo que forma junto a sus hermanos Alejandro y Adrián, y que en 2007 cumple 20 años.

–Pero más allá de las posibilidades que abre la medianoche, también se trata de un horario que en la pantalla de TyC Sports es el más exigente históricamente...

–Somos conscientes de que la medianoche del canal demanda un desafío mayor. Lo que me deja tranquilo es que el programa está consolidado, no estamos arrancando de cero. Además, hoy por hoy, noto que los canales de TV abierta han descuidado el horario de la medianoche, tal vez porque ahora ya no se mide el rating hasta el cierre de transmisión sino hasta las 12 de la noche. Aun así, ya le aclaré a la dirección del canal que no nos pueden exigir rating cuando comience la temporada fuerte y el prime time de la TV abierta sobrepasa largamente la medianoche. En la actualidad, la medianoche forma parte del prime time.

–La diferencia es que usted está en una señal de cable y no en un canal de aire...

–Por suerte. Creo que si hoy me ofrecen una pantalla de TV abierta para hacer Estilo K, rechazo la oferta sin dudarlo. En TyC Sports yo sé que a mi programa lo van a juzgar por el contenido y no por una planilla, si bien entiendo que el rating del ciclo lo van a ver de reojo. Pero el criterio de nuestro trabajo será si el ciclo divierte o no. Además, en el cable yo me garantizo un contrato anual para el ciclo, mientras que en TV abierta todo es cada 3 meses, con suerte. Cada semana hay un programa que deja de emitirse. La TV abierta se convirtió en un arma mortal. El rating minuto a minuto y la brutal competencia desvirtuó el sentido de la TV.

–Usted comenzó actuando en el Parakultural con Los Vergara, un grupo de estirpe callejera. Sin embargo, desde hace años está cada vez más alejado de la calle. ¿No la extraña?

–Estoy alejado de la calle desde lo profesional, pero no desde lo personal. Todo lo que soy se lo debo a la calle y lo extraigo de ahí. El problema es que la calle actual no es la misma que la de hace 10, 15 años. Hoy la gente está más irascible y más violenta. Y uno también. Esa es una combinación que puede ser explosiva para hacer humor, en el peor sentido de la palabra “explosiva”. Por más cuidado que se tenga, en cualquier momento, cualquier situación, por más inocente que sea, puede terminar mal. Pero sé perfectamente que la calle o la cancha es donde mejor me muevo.

–La cobertura periodística del Mundial de Fútbol de Alemania fue muy criticada por las ridiculeces y el tono “gracioso” que impusieron los noteros. Usted realizó la cobertura para Telefé, con la salvedad de que proviene del humor. ¿Qué opina al respecto?

–Se criticó mucho la cobertura del Mundial que hicieron los periodistas. Es cierto que fue menos periodística que otras veces, pero creo que se debió a que había que transmitir durante muchas horas y la palabra de los protagonistas era escasa. Además, la mayoría de los futbolistas se prenden mucho con ese tipo de cosas. Yo no lo veo mal, siempre que al humor se lo tome como un recurso de una cobertura mucho más amplia e integral. Lo que sí me causa gracia es que muchos periodistas que nos criticaban a nosotros por lo que hacíamos en VideoMatch terminaron haciendo lo mismo. Con una diferencia: cuando nosotros hacíamos la cobertura para VideoMatch, dejábamos primero trabajar a los periodistas y recién ahí atacábamos al jugador. Teníamos cierto código que en el Mundial, probablemente por desconocimiento de esa tarea, muchos no tuvieron.