Una ruptura radical con el modelo tradicional de la historieta se avecina desde la pequeñísima pantalla del celular. “¿Comics para el móvil? ¿Cómo lo leés?”, es la duda inmediata. Hugo Simkin se dedica a guionar historietas para una de las tantas empresas que ofrecen contenidos para celulares (http://www.inmunega mes.com). Esta vende las historias como “juegos”, ya que estos comics efectúan un movimiento paradójico: por un lado vuelven a la simpleza del dibujo y el texto escueto, pero por otro lado rompen con la estructura narrativa tradicional y se formulan al modo de la serie de libro-juegos Elige tu propia aventura de los años ’80.

“Línea clara, colores plenos y sin sombras, y no mucho fondo”, así caracteriza Simkin a los dibujos en este formato. Pero se sabe: la tecnología avanza a pasos agigantados y así como el viejo modelo “con linternita” dejó paso a otros con todos los chiches, la capacidad de estos últimos fue creciendo. “A medida que los celulares soportaron más peso pudimos meter más detalles, pero siempre limitados a lo que se puede ver en la pantalla: desplazar la imagen es engorroso.”

¿Y la historia? Simkin cuenta que comenzaron analizando los Elige. . . y descubrieron que no cumplían con la curva dramática que Aristóteles definió hace 24 siglos y que autores contemporáneos aún estudian. “El primero lo hicimos así, pero ahora intentamos mantener la estructura narrativa en todas las opciones, para que no suceda que la máxima tensión esté en el medio y después se caiga.”

Otra dificultad es la naturaleza episódica que caracteriza a varios de los personajes más tradicionales de la historieta. ¿Cómo hacer la continuación de un episodio que para la gente pudo haber terminado de al menos tres o cuatro maneras distintas? “No nos gusta que si el lector eligió un final haya que forzarlo a una historia que empieza tras otra conclusión.” “Hay puntos intermedios entre eso y escribir una historia para cada lector, porque el árbol se abre exponencialmente”, reflexiona. “Estamos viéndolo para implementarlo pronto.”

En un mercado con todo por explorar, Simkin señala que un subgénero particular dentro de las historietas podría adaptarse bien a la pantalla del celular: el humor gráfico. Ese de un cuadrito, como los chistes de tapa de Rudy y Daniel Paz en este diario, que por su línea simple y su tamaño no estarían tan constreñidos en este formato.