Mentira y verdad borraban sus límites en esos casos; Perla lo sabía de sobra, y confiaba en que la justicia se elevara por encima de esa endeble frontera. A menudo se cree, pensaba, que hay uno que arroja la primera piedra, pero, ¿qué quiere decir eso? Mejor sería preguntarse quién colocó por delante la cantera para que la piedra sea posible. Los matrimonios comienzan siendo un papel terso que con el correr de los días terminan por ajarse, a veces más, a veces menos. En cada discusión el papel se convierte en un bollo, y en las reconciliaciones vuelve a desplegarse; sin embargo, ya resulta imposible que sea el mismo terso papel del primer día. Inútil pretender dilucidar quién fue el responsable del primer doblez. Pese a eso los escritos tienden a crear la ilusión de que la justicia persigue sólo ese fin, el de repartir los dobleces en el papel y no los pedazos rotos lo más equitativamente posible.

* Fragmento de Cuarteto para autos viejos (Eterna Cadencia).