Luis Gusmán está entusiasmado como un chico que tiene que desmontar un juguete nuevo. Lo convocaron para escribir un libro sobre espiritismo en Babilonia, la nueva colección de la editorial Kier, en la que se publicarán diversos textos donde los temas new age y de autoayuda tendrán una vuelta de tuerca desde el enfoque y la escritura. “Escribí un trabajo más psicoanalítico sobre problema del suicidio en el espiritismo, que es tan condenable como en el catolicismo. Leí en las memorias de una médium que hay en el más allá una suerte de colonia de suicidas para su rehabilitación, como si fuese la colonia penitenciaria de Kafka –cuenta el escritor–. En esa colonia hay un hospital donde hacen cirugías estéticas para que el cuerpo astral se recupere del efecto estético de la deformación del suicidio. Pero hay una cosa muy interesante en este libro que parece La invención de Morel: hay un montón de máquinas de duplicación de imágenes, que anticipan, en los años ‘50, las videocámaras del presente. Entonces se me ocurrió trabajar la relación del espiritismo con la ciencia a través de la técnica.”