En la Competencia Oficial de Largometrajes de Ficción del Festival de La Habana se presentó Rabia, del ecuatoriano Sebastián Cordero, quien debutó como cineasta en 1999 con Ratas, ratones y rateros. La nueva película, realizada con capitales colombianos y españoles, fue producida por el reconocido Guillermo del Toro y está basada en la novela homónima de Sergio Bizzio, autor del cuento “XXY”, que su pareja Lucía Puenzo transformó en un largometraje. La historia de Rabia tiene como protagonistas a José María y Rosa, dos inmigrantes sudamericanos que buscan un futuro mejor en España: él como albañil y ella como empleada doméstica de una familia adinerada. En el comienzo de la trama se ve que el capataz discrimina a José María hasta que finalmente lo echa por error. Cansado del maltrato, José María va a buscarlo un día a la obra en construcción, lo empuja y lo mata accidentalmente. Pero no le cuenta nada a Rosa. Como lo andan buscando, no tiene mejor idea que esconderse en el sótano de la mansión donde trabaja su novia, sin que ella sepa dónde se encuentra. Sólo se comunican por teléfono. El hijo del matrimonio adinerado comienza a acosar a Rosa hasta que finalmente termina violándola. Entonces, José María busca hacer justicia por mano propia. Si bien al principio Rabia muestra el tema social de los inmigrantes, la esencia del film va por otro carril: con un clima claustrofóbico, la trama comienza y se desarrolla como un thriller pero, en realidad, termina siendo un drama íntimo de personajes solitarios y de un amor imposible.