Lunes, 16 de agosto de 2010 | Hoy
CULTURA
Historia de los intelectuales en América Latina, los dos tomos publicados por Katz, ha generado una red intelectual. “Yo no conocía a muchas de las personas que han colaborado, y en algunos casos no las conozco personalmente, pero mantengo con todas una relación de tipo intelectual”, dice Carlos Altamirano, ensayista e investigador, que hasta el año pasado dirigió el Programa de Historia Intelectual Latinoamericana en la Universidad Nacional de Quilmes, donde se inició el proyecto. “Todos los trabajos se escribieron especialmente para el volumen. Esto es lo que permitió darle cierta orquestación en una historia”, aclara el director general del proyecto, que en esta ocasión ha contado con notables trabajos de Oscar Terán, sobre la revista Amauta; de Gonzalo Aguilar, sobre el cambio social y las narrativas de identidad; de María Teresa Gramuglio y su perspectiva sobre Sur y el grupo que se generó en torno de la revista; y Nora Catelli y su análisis sobre la élite itinerante del boom, entre otros. “El intelectual como actor de la escena pública, como actor del debate cívico, creo que sigue vigente hasta la actualidad. Tal vez porque la definición misma de intelectual liga a esta figura al combate político, aparte de indicar que se tiene determinado tipo de competencias de orden cultural. Este es otro elemento continuo a lo largo de las décadas de las que se ocupa el libro. Y eso no ha cesado.”
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.