Pedro Mancini y Darío Fantacci se conocieron hace muchos años en el taller de Juan Zanotto. A ellos se les unió pronto Santiago Fredes y, tras un año de intensas reuniones y dibujo en conjunto, dieron a luz Niños Ultramundo, con una primera portada de Juan Bobillo. Un proyecto independiente y autogestivo que no encontraba cabida en ninguna editorial, pero que hoy encuentra a sus autores en alza: además de proyectos personales que se consolidan, una selección de su revista hecha especialmente para el mercado francés acaba de ser reconocida como parte de la selección de la bd alternative, es decir, de la historieta independiente dentro del Festival Internacional de la BD d’Angoulême.

“Llegamos ahí por Claire Latxague, que colabora con nosotros hace seis años”, cuenta Mancini. Latxague es responsable del sello lyonés Insula, es académica (hizo su tesis en torno de la obra de Quino) y es una poderosa promotora de la historieta argentina y latinoamericana en Francia. Del colectivo Niños Ultramundo ya organizó dos muestras en su país y este año editará un libro de Mancini, además de otros, como El asco, de Diego Agrimbau y Dante Ginevra. “Ella nos avisó que estaba esta convocatoria y mandamos los ejemplares”, explica. Aunque no ganaron la categoría, Mancini reconoce la importancia de la selección: “Todo suma, ayuda a preparar el campo; antes no se nos hubiera ocurrido editar Ultramundo allá, pero ahora se nos ocurre pensar en una edición francesa y, claro, a la edición de mi libro también va a ayudar”, considera.