Gabriel Guralnik, presidente de la Fundación Ciudad de Arena, señala que Buenos Aires 2033 es mucho más que una antología de cuentos sobre el futuro de la ciudad. Es un programa que se propone llegar a la mayor cantidad de alumnos de todo el país en los próximos tres años. Empezará con la donación de 3000 libros, que se entregarán gratuitamente, a alumnos de escuelas medias porteñas de bajos recursos. La fundación está trabajando conjuntamente con el Ministerio de Educación de la Ciudad para definir los lugares prioritarios. Pero el programa excede la donación de ejemplares (financiados por Norma y Aeropuertos Argentina 2000). “Habrá talleres en donde los docentes leerán los cuentos y reflexionarán en torno de distintos ejes planteados en el libro: inclusión-exclusión, las noticias y el papel de los medios, qué pasa con la violencia y con la tecnología”, explica Guralnik en la entrevista con Página/12. El cuadernillo de actividades para orientar a los docentes lo preparó la experta en enseñanza media Graciela Piombo. “Para muchos chicos será el primer libro que van a recibir y el primero que van a leer”, dice Guralnik.

–¿Encuentra cierta unidad en los cuentos?

–Tenía el temor de que todos los cuentos fueran oscuros, que se pensara en un futuro terrible, espantoso, con guerras nucleares, con la mayoría de la población excluida. Pero una cantidad importante de esos cuentos no muestran un futuro tan oscuro. A veces el futuro tremendo es bueno; hay muchos novelistas que plantearon futuros horrorosos que sirvieron de advertencia, como George Orwell en 1984 o Ray Bradbury en Farenheit 451.

–Y en la literatura argentina, ¿qué ejemplos recuerda que hayan funcionado de ese modo?

–El primero es Argirópolis, de Sarmiento. A fines del siglo XIX y principios del XX, varios escritores imaginaron cómo sería Buenos Aires o el país cien años después. Marcelo Cohen en Los acuáticos hace una predicción bastante interesante de lo que podría ocurrir, sobre todo respecto de las cuestiones demográficas y de la conexión de todas las conciencias, la Panconciencia, que él imagina en el futuro.