Durante la charla en la 18ª Muestra Anual de Fotoperiodismo Argentino, los fotógrafos repitieron una y otra vez el “poco espacio” que se le da a su trabajo en los medios gráficos. ¿No es paradójico que en una época en la que la imagen tiene una fuerte incidencia social, que incluso se percibe en los rediseños de los diarios, la fotografía pierda su histórico lugar? “Más que perder lugar, el problema es que adquieren valor las fotos que toma la gente con un celular o una cámara digital ante determinados hechos, en detrimento de las fotos profesionales que tienen una preparación distinta. De hecho, la foto más publicada de los atentados en Londres fue la que tomó un pasajero con un celular”, subraya Pablo Cuarterolo (Perfil). Massobrio cree que esta tendencia responde al cambio en la política comunicacional de los medios que produjo el soporte digital. “Los medios apuntan más al consumo del instante y de lo digital. Por eso rescato que en la muestra las fotos sean grandes, permitiendo otra reflexión de quien las ve”, especula. En tal sentido, Victoria Gesualdi (Perfil) cree que “el valor que hoy los medios le dan a la foto es más testimonial que fotográfico. La estética de la imagen se perdió casi por completo”. Gonzalo Martínez, presidente de Argra, cree que en el funcionamiento actual de los medios gráficos la tarea del fotógrafo no está siendo reconocida como antaño. “El fotoperiodista está siendo subestimado en los medios respecto de los redactores. Abundan las frases de redactores o editores del tipo mandame un fotógrafo por las dudas”, se lamenta. “A veces sentimos que en la rutina diaria pasamos a cumplir la función de paraguas”, agrega, generando carcajadas, Gonzalo Mainoldi (El Día).