- “La Justicia es, sobre todo, la más formidable concepción creada por el hombre para subsanar las desigualdades y tratar de igualar las aptitudes. No en forma mecánica. Porque cuando se habla de igualdad en la ley, la igualdad debe ser entre iguales y no entre todo el mundo. O hay justicia o hay darwinismo. Fundamentalmente, la Justicia es el recurso que tienen los débiles para sobrevivir; sin eso nada vale, ni siquiera vale la pena de vivir. Es más, te diría que la Justicia hasta la necesitan los poderosos, los fuertes. Porque llega un momento en la vida que, por más fuerte y poderoso que uno sea, se pregunta (salvo que sea muy estúpido): Bueno, a esta altura, ¿qué he hecho yo de mi vida? Es la gran pregunta que nos hacemos, que nos debemos hacer, y la respuesta puede ser terrible”.

- “Recuerdo que en el pequeño cementerio de Yala, tan poco poblado al irme, se habían excavado decenas de tumbas anónimas porque el terror lo había usado como uno de los vaciaderos locales de sus crímenes. Poco a poco, la gente más simple del pueblo contaba que cuando venían en camiones, apagaban las luces, y con altavoces decían: ¡Que nadie salga de sus casas! En ese momento tenían preparada la máquina que cavaba la fosa. Ni siquiera eran fosas individuales, los tiraban como en un tonel. Por supuesto nadie preguntó absolutamente nada. Es decir, fue tan atroz que inclusive después la gente no hablaba, no porque habían sido cómplices –nunca yo creí en eso– sino porque el miedo los paralizó. Fue una cosa tan tremenda que la negaron porque nunca les había pasado”.

- “Mi compensación como escritor es poco ambiciosa, aunque no por eso modesta. A mí me compensan estas charlas, un par de lectores inteligentes y el aprecio, o al menos el respeto de mis vecinos a décadas de trabajo. Me miran como indiferente, pero no hay desconsideración por la tarea que cumplo; tampoco hay –es bueno que así sea– una sobrevaloración de mi oficio. Gracias a estas cosas vivo en paz con lo que hago y tengo la esperanza de que los poco que he hecho, y lo poco que pueda llegar a hacer en el futuro, alguna vez le va a servir a alguien”.

(Fragmentos de Un ejemplar de frontera, De la Flor.)