El 2007 dejó sensaciones opuestas para Guinzburg. El buen andar de Mañanas informales y de Planeta show (la obra de teatro-revista que produce actualmente en Villa Carlos Paz) no tuvo su correlato en la salud del conductor. El agravamiento de un problema bronquial que arrastra desde su niñez, el año pasado, le hizo replantearse la vida cotidiana y también la profesional. En efecto, durante julio, agosto y algunos días de septiembre, el conductor se vio imposibilitado de conducir Mañanas informales, rol que dejó temporalmente en manos de Ernestina Pais. “A nivel profesional fue maravilloso y a nivel personal hubo meses realmente complicados porque mi salud no estaba nada bien”, se limita a profundizar el animador. Según cuenta, ese percance le hizo rever su planificación para el año que acaba de comenzar. “Me hizo replantear mi manera de vivir. Yo me levantaba a las 6 de la mañana y a las 7 salía para el canal. Y con mi problema, salir a esa hora de casa no es lo mejor que me puede pasar. Y el cuerpo me lo hizo pagar. Y me tuve que plantear mi funcionamiento diario si quiero que haya Guinzburg un tiempo más”, puntualiza Guinzburg. Por eso, además de La Biblia y el calefón, previsto sólo para completar 13 emisiones durante el verano (“después veremos qué dice la gente y mis ganas”, dice), el conductor decidió dejar la conducción diaria de Mañanas informales. “No me alejo definitivamente del ciclo. Lo que hicimos fue una reestructuración del programa, en la cual mi participación se va a dar de otra manera. Pero eso no significa una ausencia mía en el programa. De hecho, ya estoy pensando en secciones nuevas que haré para Mañanas...”, adelanta. Entre los nuevos integrantes que se sumarían al staff, se encuentran en carpeta Ronnie Arias y algún humorista más.