Este número de Ciencia Hoy está enteramente dedicado a nuestro maltrecho, emparchado y castigado planeta. Especialistas argentinos opinan sobre el origen de la vida en la Tierra; las principales funciones y características de los suelos; el crecimiento poblacional y la reconfiguración de las poblaciones; los asentamientos humanos en espacios con alta probabilidad de sufrir cataclismos, entre otros tantos, muchos, e importantes temas.

El título de tapa: “2008 Año de la Tierra”. El planeta cumple un año más y sus achaques comienzan a notarse por todos lados. Pero no es un capricho de los editores ni mucho menos. El 22 de diciembre de 2005, la Organización de las Naciones Unidas declaró a este año como Año Internacional del Planeta Tierra.

El gesto simbólico busca, como nunca, llamar la atención de los países industrializados –pero también de sus sociedades– para que los líderes mundiales tomen conciencia de los peligros a los que se somete al planeta. Casualmente, Gabriele Paparo, agregado científico de la Embajada de Italia, afirmaba días atrás, en un encuentro donde se difundía la realización de un workshop sobre el impacto y las consecuencias del cambio climático, que el dióxido de carbono (CO2) no era el principal responsable del calentamiento global.

Si bien la eliminación de CO2 en la atmósfera aparece una y otra vez en el discurso de “militantes ecologistas” de la talla del ex vicepresidente norteamericano Al Gore, Paparo afirmaba en el lanzamiento del workshop que las principales causas de este proceso se hallaban en las desertificaciones provocadas por los desmontes y talas de bosques y, también, gracias a la energía endógena que produce a diario el planeta.

Expresiones para discutir, para provocar, para iniciar el debate. Debate pendiente en la agenda social pero también científica de nuestro país.