Detrás de cada palabra,
de cada discurso, se esconde la historia del lenguaje, que trasciende sus apariencias
de mera herramienta para la comunicación y se transforma en clave para
entender la propia identidad. Y, como es natural suponer, eso hace que su apropiación
genere polémicas (por ejemplo si la defensa de un idioma regional es o
no funcional a la globalización) y motive por ende discusiones de soberanía.
Para abordar estos temas, Futuro eligió algunos fragmentos del Café
Científico en el que Rosalía Vofchuk y Elvira Arnoux, lingüistas
de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires,
dejaron claro que referirse al origen del lenguaje es ya una reflexión
sobre el lenguaje.