MONDO FISHION
› Por Victoria Lescano
Hay modelos de zapatillas –bota con lunares multicolores, otros con calaveritas de impronta animé– que remiten al modelo 1978; botas con prints psicodélicos, estampas animal, cuadros vichy sobre bases blanca o negras; otros que rescatan la elegancia de zapatos –en gamuza azul, roja, verde musgo o negro. Se trata de la carta de diseño de la firma de calzado deportivo y técnico Krial, que representa un caso rara avis de la industria argentina. Todas las estampas antes descriptas se pueden apreciar en un gesto de coquetería skater en las pequeñas pantallas de una lámpara elegante que cuelga del local de Palermo –Gorriti 4954– que conjuga interiorismo con vitreaux y exhibidores de ediciones limitadas más novedades en atuendos deportivos y una muestra de tablas tuneadas por artistas skaters.
La historia oficial cuenta que comenzaron a tomar forma en 2002 desde un garaje de zona norte gracias a los oficios y las necesidades de cinco amigos skaters en busca de modelos que reflejaran una estética local y en clara oposición a la manufactura esclavista hecha en Asia por los holdings del calzado deportivo. Entre los skaters y diseñadores se alistan Rubén Ferrari, Gianfranco de Gennaro y Luciano Cristóbal –la web oficial difunde y documenta los diseños de cada autor y deportista, así como también cortos referidos a ese deporte–.
Las zapas que fueron concebidas para cultores del skate cautivaron a diversidad de públicos y devinieron último grito de la moda en otros escenarios: ya asomaron en producciones de moda tributo a la alta costura protagonizada por los emos que merodean el Palacio Pizzurno de una reciente edición de la revista Barzón de diseño y arquitectura, en shootings de la revista femenina Entrecasa, en los pies de usuarios de nueva costura y hasta fueron tema de un desfile en la discoteca Rumi. La firma sponsoreó además una reciente muestra de fotografía de Gustavo Di Mario Córdoba –consagrada a los modelos de la agencia Civiles–.
Del lado de la producción industrial las cifras indican que así como en 2006 alcanzaba los 7 mil pares de zapatillas y en 2007 saltaron sobre sus tablas a los 25 mil pares; en 09 superan los 45 mil pares anuales. Cifras que recuerdan al furor de antaño de las clásicas Flecha Medio Basquet y Las Flecha de Oro circa 1970 y en plan más retro aún a las Champions y a las Llavetex –calzado popular de factura entrerriana cuya campaña publicitaria esgrimía: "Las que usan Juan, Pedro y Andrés"–. Por otro lado la participación de deportistas en los procesos recuerdan el modus de las Pampero Tenis y las Topper cuando a modo de ensayo y error –y para contribuir a la financiación de los viajes en torneos internacionales– las firmas acostumbraban probar sus modelos en los pies del tenista Guillermo Vilas.
Otro de los ejes alrededor del consumo de Krial remite a la apropiación de sus modelos que hacen las mujeres que veneran el skate y quienes no encuentran modelos de su agrado entre las propuestas del mainstream, léase Nike, Adidas y Puma. Al furor de las Krial entre las deportistas locales se lo puede apreciar en los links de skate femenino –girlslas sault.blogspot.com u otro referido a de-
portes extremos http://www.chicasextremas.com/ que deja sentado a Rosario como cuna del skate femenino– y en el fotolog de una diva local del skate llamada Paula Videla quien es sponsoreada por la firma en la categoría amateur y hace aportes de diseño. Mecu –tal es su apodo– luce botas de caña alta en versión fucsia y otro colores variados para saltar con su pelo rubio y con largos rizos sobre su nave skater cada vez que participa de torneos en Chile, Brasil y las provincias argentinas.
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