ESCENAS
En Impalpable –inspirada en el universo de Manuel Puig– se cuenta, al fin y al cabo, la historia de una separación. De ese momento preciso en el que uno reconoce que el deseo del otro ya no coincide con el propio e, inevitablemente, no queda más que tomar caminos distintos.
› Por Sonia Jaroslavsky
Impalpable está interpretada exquisitamente por Elisa Bressán, Maia Orihuela y Malena Schnitzer. La cuidada dirección está a cargo de Sergio Calvo, quien propone un material surgido, en primera instancia, de la lectura de Cae la noche tropical porque proponía al grupo de trabajo una estructura apropiada: dos mujeres que hablan de otra que no está. Malena Schnitzer, una de las actrices y también una de las dramaturgas de esta obra, explica que “luego, nos zambullimos en el resto de la obra de Puig, en su biografía, en su mundo poético”. En el montaje no se observa un recorte de sus textos, ni la traspolación de sus personajes, sino más bien la toma de recursos como imágenes, disparadores para construir una historia nueva.
Para el grupo de actrices, Puig maneja un universo femenino muy intenso e interesante para llevarlo a escena. “Trabaja con los vínculos desde un lugar muy complejo. Los personajes nunca dicen lo que les pasa, y sin embargo uno puede leer a través de un gesto, o de un objeto, o incluso de otra escena, qué es lo que les ocurre. Ese modo de administrar la información fue algo que nos atrajo mucho. Pero también, y sobre todo, el modo en que los personajes de Puig de alguna manera ficcionalizan su vida, cómo se amparan en la ficción para soportar esa vida que les tocó.” Es justamente cuando el grupo de teatro investigó sobre la biografía del autor que se encontró con que la relación con la ficción era algo que atravesaba toda su obra, porque básicamente resignificaba su vida. Schnitzer agrega: “Que él mismo había necesitado meterse en la penumbra del cine para poder escapar de ese western, de esa película que era su realidad y en la que había entrado por error. Esa relación con la ficción fue una premisa que guió todo nuestro trabajo”.
Los personajes de Impalpable son tres mujeres de un pueblo perdido en la Argentina de los años cincuenta. Cada una de ellas tiene un vínculo especial con ese pueblo. Blanca se ha ido, cambió su nombre por uno artístico, abandonó el pueblo para irse a la Capital y triunfar como actriz. Estela, su amiga de toda la vida, simplemente la espera. Sigue en ese pueblo, trabajando en la pastelería de siempre, con el deseo de que Blanca cumpla con su promesa y la saque de allí lo antes posible. Y Liliana es la que llega, es la que se escapa de un pueblo lindero, con un secreto que la avergüenza, a ocupar el puesto vacante en la pastelería donde trabajaban. La actriz explica que el vínculo entre ellas es justamente lo que cambia a lo largo de toda la obra. “En un principio, sí, vemos a dos que son amigas íntimas y a dos que no se toleran. Pero esos vínculos se vuelven más complejos a lo largo de la obra. Quisimos hablar de eso. De lo que finalmente queda cuando se termina una historia de amor, y lo que aparece cuando otra comienza. El vínculo más perdurable es con el afuera. En eso sí se parecen entre sí: el pueblo es hostil, es una sociedad que las juzga constantemente, un paisaje que no es nada más que pasto pero, a la vez, una carga que deben soportar en silencio.”
Algo del lenguaje cinematográfico se observa en la concepción de puesta. Así como Puig se refugiaba en la penumbra del cine para huir de su entorno, los personajes de la obra proyectan sus vidas a través de la pantalla de un cinematógrafo imaginario. Cuando la realidad se les impone, la ficción es la única que les posibilita un final feliz.
Impalpable. Viernes, a las 21. Vera Vera Teatro. Vera 108. Entradas: $45 ($35 para jubilados y estudiantes). Reservas: 4866-5487.
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