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El gol de Gastón Esmerado, a ocho minutos del final del partido, fue la única diferencia en la victoria que Arsenal obtuvo como visitante ante Lanús. La lluvia torrencial que cayó antes y durante el partido desvirtuó el espectáculo, pues se jugó sobre un terreno anegado, donde la pelota casi no podía picar.
La segunda mitad fue un calco de la primera, hasta que Esmerado capturó un rebote ingresando en el área rival y su derechazo se incrustó en el arco local para decretar el triunfo de la visita. Sin tiempo para reaccionar, Lanús sufrió una réplica sobre la misma caída del telón, en la cual Romero pudo aumentar la mínima ventaja.
Con el triunfo, Arsenal superó el objetivo que se había planteado el plantel de llegar a los 25 puntos en el Apertura para el promedio del descenso de la temporada.