Domingo 5 de septiembre de 1993. Ante un estadio Monumental colmado, con Diego Maradona en la tribuna, la Selección Argentina de Alfio Basile se jugaba su clasificación para el Mundial de Estados Unidos, obligada a triunfar ante Colombia para lograr su pasaje. Sin embargo, dos goles de Freddy Rincón, otros dos de Faustino Asprilla y uno de Adolfo Valencia determinaron un histórico 0-5, que marcó a fuego el ciclo del entrenador. Casi catorce años después, Basile tendrá una especie de revancha ante ese adversario tan especial. Por más que hayan pasado “como mil años”, como el mismo técnico definió ayer en la conferencia de prensa en la que ratificó el mismo equipo que arrancó en el debut ante Estados Unidos.

Más allá de la humorada, Basile no tuvo problemas para hablar de aquel partido, aunque dejó en claro que es parte del pasado, por más que aseguró que nunca se olvidará de esa derrota. “Ese día nos dieron un baile bárbaro, pero eso ya pasó hace mucho. Ahora hay que pensar en el partido de mañana (por hoy)”, dijo el conductor argentino, que no quiso darle entidad de clásico al compromiso ante los colombianos. “Clásicos son los partidos con Brasil, Inglaterra y Uruguay, en ese orden”, indicó el entrenador, que aprovechó la ocasión para dar muestras, una vez más, de su filosofía futbolística.

Sin faltarle el respeto al adversario, Basile fue muy concreto al asegurar que no le preocupa lo que pueda generar Colombia sino que su pensamiento está focalizado en lo que consigan crear sus dirigidos. “No me preocupa el planteo de Colombia, me interesa que hagamos bien las cosas nosotros. Recién cuando vea la planilla, voy a pensar lo que pueden provocar esos jugadores, pero yo siempre, sin subestimar a nadie, pienso en la forma de jugar de mi equipo. Si tenemos la pelota nosotros es muy difícil que puedan lastimarnos”, sostuvo Basile, que siguió casi con una declaración de principios: “Argentina tiene una táctica de juego y se aferra a ella, pero las que marcan el desequilibrio son las individualidades”.

Claro que el ex entrenador de Racing y Boca se explayó sobre lo que pretende para el partido de esta noche. “Argentina tiene una manera de jugar, y juegue contra quien juegue va a hacerlo como a mí más me gusta. Es decir, tratando de tener el balón el mayor tiempo posible para luego buscar que el desequilibrio lo generen los más talentosos”, resaltó Basile, que no tuvo inconvenientes para confirmar el mismo equipo que ante Estados Unidos y fundamentar las razones de esa decisión. “Hay que darles confianza a los jugadores, eso es lo que queremos. Por eso juegan los mismos once”, señaló el técnico, que hasta se dio el lujo de chicanear a los periodistas cuando anunció la presencia de Esteban Cambiasso, la única especulación que hacía la prensa en cuanto a la formación.

Pero, más allá del partido ante los colombianos, la visión de Basile sobre la confianza a sus jugadores tiene una mirada más profunda. Y por eso aclaró la convocatoria de varios jugadores que posiblemente no lleguen para el Mundial de Sudáfrica. “Hay que ir moldeando la mística del equipo y los jugadores más experimentados influyen sobre los más jóvenes en ese aspecto. Yo pienso siempre en el presente y el presente es este torneo y las Eliminatorias”, comentó Basile, que dejó en claro que no le va a importar la edad de ningún jugador a la hora de tener que convocarlo.

Una de las cuestiones que también llamó la atención por los antecedentes de otros ciclos es la libertad que el técnico les brinda a los futbolistas, a los que les permite compartir los ratos libres con sus familiares. Y en ese sentido, Basile defendió esa postura, con sus argumentos. “Lo más lindo para un jugador es estar con su familia. Yo soy un tipo que desdramatizo todo y creo que es importante para un futbolista estar con sus hijos, por ejemplo, en los momentos que no se trabaja. Se les hace más llevadero”, indicó Basile.