Con goles de Roque Santa Cruz y Salvador Cabañas, Paraguay le ganó merecidamente 2-0 a Brasil, como local, y más que nunca se afirmó como el único líder de las Eliminatorias. El conjunto dirigido por Gerardo Martino, que jugó casi todo el segundo tiempo con un hombre menos, fue mucho más, tuvo las situaciones más claras y realizó un planteo muy inteligente ante un deslucido Scratch que no tuvo reacción y se pareció mucho al equipo que cayó hace una semana ante Venezuela. Los hinchas brasileños que estuvieron ayer en Asunción insultaron al técnico Dunga y pidieron su renuncia.

El encuentro se dio como se había previsto en la semana. Desde el primer minuto, el seleccionado guaraní salió a buscar el partido empujado por sus mediocampistas y su tridente ofensivo, mientras que los brasileños se dedicaron a esperar y aguantar en su propio campo el asedio de su ambicioso rival. Así, la cancha comenzó a inclinarse hacia el arco de Julio César, a pesar de las imprecisiones y los pelotazos largos de los volantes para Cabañas y Santa Cruz.

El primero asustó con una pelota que se estrelló en el poste luego de un remate esquinado. Pero el segundo no falló. Tras un corner desde la izquierda, y dos yerros de sus compañeros, la pelota le quedó en el segundo palo y sólo tuvo que empujarla para concretar el 1-0. De esa manera, el conjunto de Martino capitalizaba su superioridad frente a un débil adversario.

A partir de ese momento, Paraguay se retrasó y favoreció el crecimiento de Brasil, que empezó a manejar los hilos del partido, pero sin lucidez. En el medio, Diego no encontró los espacios, presionado por Vera y Santana que le comieron los talones, y Robinho y Luiz Fabiano poco pudieron hacer aislados de la línea de mediocampistas, que se repetía una y otra vez con pelotazos sin dirección. Así, Brasil salió decidido a atacar y pareció que podía llegar al empate después de la expulsión de Verón, en el inicio del segundo tiempo. Pero eso no pasó. Cuando daba la sensación de que se venía abajo todo lo que había construido hasta ese momento el seleccionado paraguayo, Cabañas, en un contraataque, le dio el segundo que liquidó el partido y puso al descubierto las deficiencias en defensa que tiene el conjunto brasileño.

Estadio: Defensores del Chaco (Asunción).

Arbitro: Jorge Larrionda (Uruguay).

Goles: 26m Santa Cruz (P); 49m Cabañas (P).

Cambios: 46m Anderson por Maicon (B); 57m Adriano por Mineiro (B); 69m Julio Baptista por Diego (B); 73m Torres por Cabañas (P); 80m Cardozo por Santa Cruz (P).

Incidencia: 47m expulsado Verón (P).