Chile se mostró confiado y pensó que Venezuela no podía herirlo, pero el exceso volvió predecible y escaso de movilidad al equipo de Marcelo Bielsa, que perdió una inmejorable ocasión de asegurar su clasificación al Mundial después de 12 años.

“Fueron dos puntos perdidos”, dijo Marcelo Bielsa a propósito del 2-2 final. “Son partidos muy especiales, no deberíamos explicar por qué no lo ganamos sino haberlo ganado”, dijo el entrenador. “Debemos tener antídotos frente a los errores que cometemos, pero a veces no funcionan; en esta ocasión nos costaron dos goles. Repito que no fueron exclusiva virtud del rival, contaron con algunas licencias de nuestra parte”, añadió.

“Chile aguó su propia fiesta”, señaló el diario El Mercurio. “El primer tiempo de Chile fue de lo peorcito mostrado por la selección este año: el equipo se vio predecible, sin sorpresa y escaso de movilidad. El terreno no ayudaba: muchos se resbalaban y el trámite era brutal en lo físico”, apuntó.

“La lluvia aplacó el fuego rojo”, escribió por su parte el diario La Tercera, que consideró que Chile tenía todo listo para separarse a nueve puntos de los quintos en la clasificatoria sudamericana al Mundial de Sudáfrica 2010, pero una pobre actuación en el primer tiempo y una sólida resistencia de Venezuela les impidieron quedarse con el partido. “No importa, cabros (muchachos), en Brasil clasificamos”, tituló en su portada el diario La Cuarta.

Respecto del próximo partido con Brasil, que es la gran bestia negra de Chile, al que ha goleado de forma sistemática en los últimos años, Bielsa insistió en que tratará de imponer sus principios básicos de juego. “Vamos a intentar atacar más que defender, de tener la pelota más que correr para recuperarla, de jugar en el campo rival y de tener posición de búsqueda”, explicó. “Lo que no haremos es buscar una posición especulativa, después tratar de imponer dominio y posiciones. No es sencillo hacerlo con Brasil, pero peor sería darle el campo y la pelota y esperar. Esa actitud no la elegiría.”