Banfield y Arsenal empataron 1 a 1 en un partido que por los nombres de los protagonistas y las camisetas tenía todo el color del ascenso, pero que a la luz de los relativamente desahogados promedios de ambos conjuntos, y sus rendimientos últimos, permitió que se vieran pasajes de buen fútbol.
Desde el principio, los mediocampos de ambos plantearon una lucha enconada, pero no solamente con la mira puesta en recuperar la pelota sino con el objetivo inmediato de progresar en ataque. Dentro de ese panorama, el que más se destacaba en la visita era Silvio González, a la postre la figura de la cancha, quien desnivelaba en base a habilidad.
Por contrapartida, en el local estaba apagado el “Lorito” Walter Jiménez –acaso afectado psicológicamente por un asalto sufrido recientemente–. Por eso, González fue creciendo a partir de su fútbol, y de sus pies nació la jugada más clara del primer tiempo cuando habilitó a Piersimone, quien perdió en el mano a mano con Lucchetti.
Y en el arranque del segundo tiempo llegó la apertura del marcador para la visita cuando el “Pulpo” Silvio González se sacó dos marcas de encima y con un derechazo cruzado abrió el tanteador. Pero Banfield reaccionó rápido y a los 5 ya avisó con un cabezazo de Roberto Colautti, que salvó Limia. Y al minuto siguiente, el ahora repentinamente iluminado ex Boca disfrutó de un mano a mano y definió por encima del arquero.
Después se desató un fuerte aguacero y esto modificó las condiciones del terreno y el consecuente desarrollo del juego, que tuvo a Banfield presionando hasta el final y a Arsenal defendiéndose y tratando de manejar el contraataque. Finalmente, los dos se fueron conformes. En definitiva sumaron un punto que les permite seguir en racha. Para Banfield, fue llegar a los 18 puntos. Y para Arsenal, otra visita sin caída en una campaña sorprendente.