FúTBOL › EL AÑO DE RIVER E INDEPENDIENTE
Punto a punto
Por Juan José Panno
Diez de cada diez futboleros mencionarán al toque a Independiente si se les pregunta por los campeones de fútbol local del 2002; la mitad de ellos, al menos, dudará con el nombre del otro equipo y alguno directamente no recordará que se trataba de River. La últimas imágenes suelen aparecer con mayor nitidez a la hora de cualquier balance, y por eso Independiente ocupa, en este caso, un lugar de privilegio en la escena. Pero además se juntaron varios factores para confinar a River al segundo plano.
Una recorrida cronológica del fútbol local en el 2002 encontrará el primer capítulo importante en la fecha jugada el 28 de abril. Ese día, en un final de infarto, River venció a Racing mantuvo casi milagrosamente una ventaja de 4 puntos sobre Gimnasia a 3 fechas del cierre y se metió el título en el bolsillo. Ese mismo día el equipo platense había goleado por 3 a 0 a Argentinos y Boca, con remotísimas esperanzas, había caído ante Banfield por 1 a 0, y lo expulsaron a Riquelme por pegarle a un grotesco toquetón de apellido Santa Cruz. Fue, como se dijo, hace 8 meses, una verdadera eternidad. Cronistas de aquellas lejanas epopeyas futboleras habrían registrado con florida, y casi patética, verba, el instante crucial del triunfo millonario.
“Siendo que confrontaban a orillas del Mar Dulce, descubierto por Don Juan Díaz de Solís, las huestes de Don Ramón (Calvo) Díaz y las de Don Reinaldo Carlos Merlo y enviado que fuera al destierro de Don Angel David Comizzo, a nada del epílogo, pasó a ocupar el portal el párvulo Martín Demichelis, en virtud de que habíase agotado la batería de reemplazos disponible. En esas circunstancias ocurrió que S.E, el sargento Daniel Giménez decretó un fusilamiento, a cumplimentarse en los límites del área mayor. Presto a la ejecución, el valiente guerrero Don Gerardo Bedoya, entrometióse el zopenco Claudio Ubeda y su disparo tras rebotar en el muro de contención generó una veloz contraofensiva del noble almirante Nelson Cuevas, quien navegó aguas arriba en solitario hasta llegar a las mismísimas barbas de Don Gustavo Campagnuolo, quien aguardó hildalgamenete la embestida, pero poco pudo hacer para evitar la caída de la académica fortaleza.”
Si los de Racing le hubieran metido el tiro libre al asustado Demichelis se llegaba a un final apasionante con River( 34 puntos), Gimnasia(33) y Racing (31), cabeza a cabeza. Pero el gol de Cuevas allanó el camino hacia el título de los de Núñez. La coronación llegó con una impresionante goleada ante Argentinos Juniors por 5 a 1. “Fue el mejor, no sólo el menos malo” , tituló Libero esa vez. River, sostenido en el cuadrado Coudet– Ortega-D’Alessandro-Cavenaghi tuvo un porcentaje de eficacia de 75.40 y una diferencia de gol de + 27. Ganó sin discusión, pero su victoria se destiñó por la pobre producción en la Copa Libertadores y una catastrófica derrota por 4 a 0 ante Gremio. De hecho, después de este torneo se fue Ramón Díaz y llegó el chileno Manuel Pellegrini.
El cierre de aquel olvidado campeonato se cruzó en el tiempo con el inicio del olvidable Mundial de Corea y Japón, que también parece haber ocurrido en otra década. Lo otro, el campeonato que ganó Independiente está mucho más fresco. El cuadro de Américo Rubén Gallego, con un porcentaje de eficacia de 75.4O (el mismo que River) y una diferencia de gol de +29, debió esperar hasta la última fecha para la consagración. Milito en el fondo, Insúa y Montenegro en la mitad de la cancha y Silvera en la ofensiva fueron los nombres insoslayables a la hora de explicar su logro. A la lista hay que agregar a Pusineri, autor del gol más importante, el más festejado de todos, el del empate ante Boca en Avellaneda. Independiente fue una sombra en el último tramo, pero lo suyo había sido tan categórico en las primeras fechas que le alcanzó.
El balance futbolístico del año no podrá obviar una referencia a San Lorenzo, el mejor de todos en el plano internacional, con dos títulos enun solo año: la postergada Mercosur del 2001, que se definió en el 2002 y la Copa Sudamericana.
Un posible equipo con los mejores jugadores del año: Saja; Ferrari, Demichelis, Milito, Ricardo Rojas; Coudet, Michelini, Montenegro, Tévez; Delgado, Acosta. Es lo que hay.