Todo salió a pedir de Boca: la derrota de San Lorenzo el sábado, la de Tigre en La Plata y el triunfo ante San Martín en un partido muy chivo, que puso las cosas de modo tal que el equipo de Ischia, con dos puntos de ventaja sobre sus perseguidores, no depende de nadie para salir campeón.

La actuación del árbitro Maglio también fue a pedir de Boca, según los tucumanos, que reclamarán durante toda la semana que no fue penal el que cobró a favor de Boca (lo tiró Riquelme y atajó Gutiérrez); que hubo por lo menos un par de penales no sancionados en el área de Boca y que no hubo infracción contra Riquelme en el tiro libre que terminó con el segundo gol boquense. Ese tanto, la jugada clave de un partido muy intenso, tuvo dos instancias espectaculares: 1) el fenomenal pase de Riquelme pegando con fina justeza a la pelota buscándolo a Figueroa y 2) la gran tijera del delantero clavando el zurdazo en el arco de Gutiérrez.

El gol fue clave porque se produjo sólo cuatro minutos después del empate en un momento del partido en el que los locales sentían que era posible dar vuelta el marcador. El empate había logrado a los 14m Saavedra con un tremendo sablazo a un ángulo y era consecuencia de la actitud que había mostrado en esa segunda etapa el cuadro dueño de casa.

En el primer tiempo, en cambio, fue Boca el que mostró más vocación y más espíritu ganador y por eso se fue al descanso con el 1 a 0 en el bolsillo. La jugada empezó en un desborde de Dátolo por la izquierda para la llegada de Alvaro González por el otro lado, y siguió con el cruce de Saavedra en el piso y el rechazo defectuoso de éste que lo dejó solo a Viatri, con el arco vacío.

Boca, que no había podido llegar al gol con el regalo del árbitro (no pareció penal a Figueroa), llegó con el involuntario obsequio de Saavedra.

Pese a repetirse en los centros de Morel para la pareja de delanteros cabeceadores, Boca había sido más incisivo, especialmente cuando ponía la pelota a ras del piso.

El partido se hizo emotivo en el segundo período. Los tucumanos mejoraron con la entrada de Ibáñez, que se movió por todo el frente de ataque y complicó a los defensores visitantes, obligando a que su rival comenzara retrasar las posiciones. A Boca le costaba mantener la pelota lejos de García, pero el arquerito respondió muy bien en los centros que llovieron sobre su área. Después de los goles de Saavedra y Figueroa, los locales estuvieron más de una vez a tiro del 2 a 2, aunque Boca también lo pudo liquidar de contra cuando Mouche entró por Viatri.

Las expulsiones de Dátolo y Pérez Castro se produjeron sobre el final, cuando no quedaba tiempo para nada. Boca se fue de Tucumán pensando en el título; los dueños de casa se quedaron pensando en Maglio.

Estadio: San Martín.

Arbitro: Carlos Maglio.

Goles: 37m, Viatri (B); 59m, Saavedra (SM); 62m, Figueroa (B).

Cambios: 46m, Ibáñez (7) por Turdó (SM); 55m, Quinteros (5) por Solana (SM); 65m, Herrera por P. Pérez (SM); 77m, Mouche por Viatri (B); 82m, Calvo por A. González (B).

Incidencias: 23m, Gutiérrez le atajó un penal a Riquelme (B); 90m, expulsado Dátolo (B); 90m, expulsado Pérez Castro (SM).