Si se buscaba más paridad a la hora de conformar el lote de los pilotos que pelearán por el título del TC en 2012, si ésa era la filosofía de los cambios técnicos implementados, eso se consiguió. En Buenos Aires, la carrera anterior, ya había siete clasificados: cuatro (Rossi, Christian Ledesma, Ortelli y Sergio Alaux) eran pilotos de Chevrolet. Ford sólo tenía asegurado a Ponce de León, aunque sus compañeros Giallombardo y Juan Bautista De Benedictis estaban dentro de los 12 primeros. Con los resultados puestos, la disputa será de 5 a 4. A Chevrolet se le sumó el ex campeón Agustín Canapino (el último de los clasificados) y a Ford, además de confirmársele Giallombardo y De benedictis, se le agregó Diego Aventín, el hijo del titular de la ACTC, que había llegado a Paraná 15º en el torneo. Torino tendrá dos representantes en los play-offs (Néstor Girolami, que se había clasificado en Buenos Aires, y Norberto Fontana, que selló ayer su participación) y Dodge tendrá a su espada habitual, Jonatan Castellano, el único piloto de TC que se clasificó para las cinco ediciones de los play-offs de 2008 a 2012. La fase decisiva comienza en Junín en tres semanas: todos los clasificados arrancan la lucha por el título sin puntos, salvo Rossi que, por haber llegado como líder del torneo a esta instancia, suma siete unidades. Después de once carreras, le había sacado 36 puntos de diferencia al segundo en la tabla, Ponce de León.