Por Patrice Burchkalter
Desde Budapest

El español Fernando Alonso se convirtió en el piloto más joven de la historia de la Fórmula 1 en ganar un Grand Prix, al imponerse de punta a punta en el GP de Hungría. De pie sobre su coche, el español, que también es el primer corredor de esa nacionalidad que triunfa en un circuito, levantó el brazo al cielo como signo de victoria. Su director, Flavio Briatore, estaba allí, con los ojos brillantes de felicidad. Precisamente Flavio condujo a Michael Schumacher a su primer título mundial. Alonso le dio a Renault su primer triunfo como escudería desde... hace veinte años, el 14 de agosto de 1983, cuando Alain Prost se impuso en el Grand Prix de Austria.
Al vencer sobre el finlandés Kimi Raikkonen (McLaren-Mercedes) y los Williams-BMW de Juan Pablo Montoya y Ralf Schumacher, Alonso entró un poco más en la historia de la Fórmula 1. En Malasia, en marzo, el asturiano ya había sorprendido al convertirse en el piloto más joven en lograr una pole-position. A partir de ahora es también el más joven vencedor de la historia (22 años y 27 días), superando la marca del neocelandés Bruce McLaren (22 años y 104 días), ganador del GP de Estados Unidos de 1959.
“El sueño se convirtió en realidad –se regocijó Alonso–. Sólo tengo 22 años y espero tener delante de mí una larga carrera para disfrutar, a menudo, de estos éxitos...”, expresó.
Una largada impecable, un ritmo endiablado durante 13 vueltas, y el piloto de Renault impuso al resto de la carrera un monopolio en la punta. Incluso en la vuelta 62 Alonso se permitió el lujo de sacarle una vuelta a Michael Schumacher (Ferrari). ¡Increíble!
El español vio simplificada su carrera por Ralf Schumacher y Juan Pablo Montoya, los dos en la parte sucia de la pista en la largada, y que, desde el inicio, perdieron cualquier posibilidad de victoria al ser engullidos por el pelotón. El colombiano era octavo en la primera vuelta y Ralf, decimooctavo, algo que los obligó a una carrera de persecución para llegar, al menos, al podio. Montoya lo logró, a pesar de un trompo a ocho vueltas de la llegada.
Sobre el podio, Alonso (22 años), Raikkonen (23 años y medio) y Montoya (27 años y medio) representaban la juventud triunfadora, o sea, el futuro de la Fórmula 1. Una juventud ambiciosa, deseosa de poner fin al reinado del quíntuple campeón del mundo.
A tres pruebas del término de la temporada (Italia, en Monza; EE.UU., en Indianápolis; y Japón, en Suzuka), el colombiano y el finlandés se encuentran a uno y dos puntos, respectivamente, del alemán. Y Williams-BMW se colocó en cabeza en la Copa de Constructores, con ocho puntos de ventaja sobre Ferrari.