Por Sebastián Fest
Desde Madrid

Su figura faltaba en el circuito desde principios de septiembre, y al reaparecer en la sala de jugadores del torneo de tenis de Madrid, Guillermo Coria no paraba de recibir saludos de sus colegas. “¡Hey! ¿Cómo estás? Aquí se viene a jugar, no a pasear...”, bromeó el español Albert Costa al ver al argentino vestido con ropa de calle y muy lejos de una raqueta.
“Físicamente estoy a un 70 por ciento. De tenis, no sé, porque estuve tres semanas sin jugar”, dijo Coria. “Espero ganar ritmo ahora con los torneos de Basilea y París para llegar bien a Houston”, agregó.
“Estar en Houston es un sueño y jugaré para llegar lejos. David (Nalbandian) va a entrar, ojalá nos toque en grupos diferentes y nos enfrentemos en la final”, dijo recordando la final española de Hannover 1998 entre Alex Corretja y Carlos Moyá.
Coria es una de las grandes revelaciones del tenis mundial en 2003. Número cinco del mundo tras ganar cuatro torneos y alcanzar la semifinal de Roland Garros, sólo el español Juan Carlos Ferrero obtuvo mejores resultados en polvo de ladrillo esta temporada. Su presencia en Houston es un hito para Argentina, que no tenía un representante en el Masters desde José Luis Clerc en 1983.
La única mancha en la temporada del santafesino fue su ausencia en
la Copa Davis. Repite desde hace años que “desde chiquitito” sueña con jugar la máxima competencia del tenis por países, pero su físico le impidió estar las dos veces en que se lo convocó este año.
La primera, para los cuartos de final ante Rusia, cuando debió decirle “no” al capitán del equipo, Gustavo Luza, debido a ampollas en sus pies. “No podía garantizar que sería un aporte para el equipo”, recuerda. La segunda fue mucho más polémica. Tras caer con André Agassi en los cuartos de final del US Open renunció a jugar por un desgarro en el aductor. Al día siguiente David Nalbandian, el otro “top ten” argentino, también dijo “no” por lesión. Argentina jugó ante España con el equipo “B” y cayó 3-2 dando lucha hasta el final. Los rumores acerca de un “complot” de Coria y Nalbandian contra el capitán Luza se dispararon.
“No sé por qué en Argentina se inventó todo esto. Tuve un desgarro de veinte centímetros y no jugué torneos en más de un mes. David tampoco. ¿Complot? ¡Si era el mejor momento para que yo debutara en la Davis! David ya lo dijo: vamos a demostrar que nos morimos de ganas de ganar la Copa Davis”, aseguró.
“Se dijo que no jugábamos porque había poco dinero. Pero los que hablan así no saben que, además de que la Davis es algo muy especial, es una competencia que da dinero a los jugadores por muchas vías”, continuó.
“Lamentablemente, los médicos en el US Open me dijeron que no había peligro en que continuara jugando el torneo, que la mía era una lesión ‘psicológica’. Confié en ellos y pasó lo que pasó”, se lamentó.
La Davis es un tema tormentoso en la Argentina. A los rumores acerca de la no continuidad de Luza, las críticas por la ausencia de Coria y Nalbandian y la decepción por la mala actuación de Gastón Gaudio ante España, se le sumaron unas polémicas declaraciones del presidente de la Asociación Argentina de Tenis (AAT), Enrique Morea, en pleno match contra los españoles, criticando la mentalidad de Gaudio.
“Es una lástima que al presidente se le hayan escapado esas declaraciones. Después, más calmado, seguro que se arrepintió”, dijo Coria.
“Con Luza está todo arreglado desde que es capitán. Pero es normal que no todos se lleven igual de bien, no creo que en la Selección todos sean amigos, ¿no?”, continuó el tenista, que en su época de juvenil tuvo sus choques con el capitán de la Davis.
“No veo por qué haya que cambiar a Luza”, dijo cuando se le preguntó por la aún pendiente renovación de contrato del capitán. “Pero me gustaría quela Federación nos consulte antes de designar al capitán y que se firmen contratos de al menos dos años para garantizar la continuidad. No es bueno cambiar de capitán todo el tiempo. Creo que tenemos suficiente importancia como para que nos consulten”.
Coria coincidió parcialmente con su compatriota Juan Chela, que el lunes pidió que se designase a Guillermo Vilas –ex número dos del mundo– como capitán. “No sé si debe ser el año que viene, pero quisiera que se les dé una oportunidad a gente como Vilas, Clerc o Martín Jaite. Porque quizás no sea en 2004, pero tenemos muchas posibilidades de ganar la Copa Davis, y ojalá que dos o tres veces”.