Desde Roland Garros

Los tenistas argentinos tratarán de sorprender en el torneo de tenis de Roland Garros, que comenzó ayer en París, a pesar del discreto papel de la legión en la temporada sobre polvo de ladrillo y las bajas por lesión de Juan Martín Del Potro y David Nalbandian. Ante las ausencias del tandilense, quien aún se mantiene quinto en el ranking, y del experimentado jugador cordobés, quien supo ser finalista de Wimbledon en 2002 y ganar un Masters Series en 2005, Argentina depositará todas sus esperanzas en Juan Mónaco, Horacio Zeballos, Juan Ignacio Chela y Leonardo Mayer.

En el primer día de acción, Chela y Gisela Dulko vencieron a sus rivales en sets corridos y con mucha facilidad. El de Ciudad Evita, clasificado en el puesto 48º del ranking, barrió con autoridad al estadounidense Ryan Sweeting por 6-0, 6-4 y 7-6 (7/4), pero no la tendrá para nada fácil en la segunda ronda, donde se medirá con el ganador del partido que enfrentará al crédito local, Richard Gasquet, reciente vencedor del torneo de Niza, y al escocés Andy Murray, cuarto cabeza de serie. Por su parte, la única argentina del cuadro hizo lo propio con la bielorrusa Victoria Azarenka, décima cabeza de serie, por 6-1 y 6-2.

Más allá del buen debut de ayer, el tenis argentino no está pasando por su mejor momento y la reciente consagración de Del Potro en el US Open de 2009 parece haber quedado muy lejana. La lesión del tandilense, su operación de muñeca y su larga baja redujo varios grados la ilusión de los aficionados, al mismo tiempo que levantó muchas suspicacias acerca de su recuperación. “Nunca me tocó estar lesionado, así que no sé mucho de estas cosas. Ojalá pueda volver a jugar este año, pero si tengo que volver en 2011 no tengo problemas”, comentó Del Potro, que confirmó que no podrá defender su título en el Abierto de los Estados Unidos del presente año.

La otra gran ausencia será la de Nalbandian, que no ha podido recuperarse de sus problemas físicos y volverá a perderse un Grand Slam, después de haberse ausentado en Australia. Los últimos dos años del unquillense estuvieron signados por las lesiones, que lo han relegado al puesto 150º del ranking y lo han alejado de la elite, en la cual supo estar siendo semifinalista en los cuatro Grand Slam y siendo número 3 del mundo en 2006.

Fuera de estas dos grandes ausencias, las miradas se dirigen a Mónaco, el argentino mejor preclasificado, en la posición número 30º, de los que estarán en París. El tandilense disputó este año una final sobre arcilla, en Santiago de Chile, donde se vio superado por el brasileño Thomaz Bellucci. No obstante, el sorteo del viernes no le brindó un cuadro sencillo, debuta mañana ante el esloveno Grega Zemlja (142º), surgido de la clasificación, y en dieciseisavos podría toparse con el estadounidense Andy Roddick, sexto en el ranking, y en unos eventuales octavos con uno de los favoritos al triunfo final, el español David Ferrer, noveno preclasificado.

Con seis hombres y una mujer en el Top-100, Argentina deposita sus esperanzas en algún tenista que pueda dar la sorpresa. Dentro de esa órbita, los señalados son Horacio Zeballos y Eduardo Schwank, quienes acompañaron a Mónaco en el equipo que ganó la Copa del Mundo en Düsseldorf, y debutarán mañana ante el austríaco Martin Fischer (191º) y el esloveno Blaz Kavcic (113º), respectivamente. Mayer (24º) debutará hoy con el ucraniano Sergiy Stakhocvsky (66º) no antes de las 8.