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No hay dos sin tres, dice una vieja frase popular. Sin embargo, para Juan Mónaco no tiene validez. El tandilense (número 14º del ranking mundial), que será uno de los representantes argentinos en los Juegos Olímpicos de Londres, cayó 6-4, 5-7 y 6-3 ante el serbio Janko Tipsarevic (8º) en la final del ATP 250 Stuttgart, y se quedó con las ganas de levantar su tercer torneo en este año, tras los conseguidos en Viña del Mar, Chile y Houston, Estados Unidos.

La parada era brava. Después de sortear las rondas anteriores con cierta holgura y facilidad, en el partido definitorio, Mónaco se encontraba con un top-ten, que a pesar de su constante irregularidad en el circuito, es un hueso duro de roer.

Y esa afirmación se hizo visible ya desde el primer set. Con un juego correcto y firme desde el fondo del campo, ambos mantuvieron su saque, y en un santiamén quedaron igualados cuatro juegos por lado. Pero ahí falló el argentino. En el noveno game, el serbio le quebró el saque a Pico y se puso adelante 5-4, para cerrar luego el set con su servicio.

Fue un sacudón para Mónaco, que en el inicio de la segunda manga estuvo desconocido. Se complicó con pelotas fáciles y cada vez que subió a la red lo hizo de manera deficiente. Así, Tipsarevic se puso rápidamente 4-0 arriba, y la historia parecía sellada. Sin embargo, el tandilense sacó a relucir su carácter y, movido por el orgullo, se recuperó de manera espectacular. Afianzado en el fondo de la cancha y sin arriesgar demasiado con sus impactos, Pico cargó contra el revés del serbio, su punto débil, y tras una inimaginable reacción se quedó con el segundo set por 7-5.

En la tercera y definitiva manga, los nervios atentaron contra el rendimiento de ambos. El tandilense sacaba 40-0 con el marcador en dos, pero increíblemente perdió el saque. A partir de allí comenzó la debacle. A pesar de los 30 minutos en los que el partido se detuvo por la lluvia, Mónaco no pudo volver nunca al encuentro, y terminó cayendo 6-3 ante Tipsarevic, que logró así el tercer título de su carrera, primero sobre polvo de ladrillo y también el primero de esta temporada. “Ha jugado mejor en el tercer set y fue un merecido ganador del torneo”, señaló Mónaco que, lejos de deprimirse, bromeó sobre el premio del torneo. “Ojalá disfrutes del auto (un Mercedes-Benz descapotable) con tu familia, mujer y amigos”, le deseó Pico al serbio.

Por otra parte, el español David Ferrer (5º) obtuvo el ATP de Bastad, al vencer por un doble 6-2 a su coterráneo Nicolás Almagro (10º). A su vez, el croata Marin Cilic (15º) se quedó con el Abierto de Umag al derrotar 6-4 y 6-2 al español Marcel Granollers (24º), mientras que el estadounidense John Isner (11º) venció 7-6 (1) y 6-4 al australiano Lleyton Hewitt (233º) y se quedó con el título en Newport.