El suizo Roger Federer se llevó ayer el título del torneo de Cincinnati al imponerse en la final 6-0, 7-6 (9-7) al serbio Novak Djokovic, con lo que festejó por quinta vez en el Masters 1000 estadounidense y se afirmó como líder del ranking mundial. Para el número uno del mundo, que ya lleva ganados seis torneos en esta temporada y la medalla de plata en Londres 2012, es el título número 76 de su carrera.

“Ha sido un verano largo”, remarcó el campeón de Wimbledon tras el título. “Cambiar de césped a cemento no es fácil, pero todos tenemos que hacerlo. Incluso, pese a lo bien que estoy jugando, nunca esperas ganar estos grandes partidos. Para mí fue una semana fantástica”, comentó el ganador, que apenas necesitó 79 minutos para sacarse de encima a su máximo perseguidor en el escalafón. En ese lapso, el suizo conectó ocho aces, logró 28 tiros ganadores y ni siquiera le dio a Djokovic la chance de un punto de quiebre en todo el partido. Con esta victoria, Federer estiró su ventaja sobre el serbio en el historial, ya que ahora se impone 16-12. Además fue la segunda final que le gana en Cinci-nnati luego de la de 2009.

El serbio se quedó con las ganas de repetir la victoria de Toronto, donde pudo adjudicarse el título después de llegar con las manos vacías de los Juegos Olímpicos. “Tuve un primer set terrible y él comenzó con un saque muy sólido. Lo implementó de un modo muy eficiente y le puso mucha presión a mi servicio. Yo hice un montón de dobles faltas y no encontré mi ritmo, en 20 minutos todo había acabado”, comentó el ex número uno, que se lamentó por no haber sacado provecho de las pocas ocasiones favorables que tuvo en el segundo parcial. “No usé las chances cuando las tenía. El merecía ganar”, remarcó Djokovic, no se quedó en la autocrítica y apuntó estar satisfecho con el esfuerzo realizado, a una semana del comienzo del último Grand Slam de la temporada.

Con esta victoria, Federer festejó por quinta vez en Cincinnati, tras obtener las ediciones de 2005, 2007, 2009 y 2010. Y a los 31 años es el jugador de mayor edad que haya ganado el torneo desde que André Agassi se impusiera en la final de 2004, a los 34 años. Pero lo más importante para el suizo es que con este triunfo en un Masters 1000 igualó al español Rafael Nadal como máximo ganador en este tipo de torneos con 21. Y además, con seis títulos, ya logró su mejor marca de torneos en una temporada desde 2007, cuando logró ocho certámenes.