Novak Djokovic (número uno del tenis) sufrió de lo lindo para batir en cinco mangas al francés Gilles Simon, ayer en los octavos de final del Abierto de Australia, en los que la top ten española Carla Suárez no se vio perturbada por el bullicioso público para batir a la local Dara Gavrilova. El serbio luchó durante 4 horas y 32 minutos antes de ganar 6-3, 6-7 (1), 6-4, 4-6 y 6-3. Disputará los cuartos de final con el japonés Kei Nishikori, que ganó ayer al también francés Jo-Wilfried Tsonga por 6-4, 6-2 y 6-4.

“Evidentemente estoy contento de haber ganado, son los últimos puntos los que cuentan, pero con respecto a mi actuación, no fue para nada buena. Puedo esperar cometer errores ante Simon, que es uno de los mejores a la contra en el circuito, que ama jugar largos partidos y largos intercambios”, analizó Djokovic en rueda de prensa. “Me alegra saber que no puedo jugar peor que hoy (por ayer). No me preocupa para el próximo partido”, agregó Nole y, sobre los 100 errores no forzados que cometió, apuntó: “Ni de cerca, no. Nunca me acerqué a los cien, pero siempre hay una primera vez para todo. Son cosas que pasan, estos días ocurren y depende mucho del rival. Gilles se defiende muy bien y te hace dar un golpe más siempre”.

“Intenté llevarlo a donde quería y me salió durante casi todo el partido, pero en el quinto set él acertó a mejorar un poco y a convertir los buenos golpes”, dijo por su parte Simon, número 14 del ranking.

Contrariado de tener que golpear la bola más de diez veces para encontrar la apertura, el serbio eligió mal en muchas ocasiones, con varias dejadas sin éxito, un signo de impotencia. “Este tipo de partidos lo hacen más humano”, señaló Simon, que sufrió una desconexión en el quinto set que le costó el partido.

En el último turno del día Roger Federer (3) no sufrió ni un rasguño ante un inofensivo David Goffin (15), al que ganó por 6-2, 6-1 y 6-4. “El partido ha sido excelente, sobre todo en los dos primeros sets. Estoy satisfecho porque David normalmente me pone en problemas en los entrenamientos”, dijo el legendario suizo, que jugará los cuartos en Melbourne por 12ª ocasión. Peleará por un puesto en semifinales con el checo Tomas Berdych (6), que impuso su clase en cinco sets ante el español Roberto Bautista (24) para vencerlo por 4-6, 6-4, 6-3, 1-6 y 6-3.

En el cuadro femenino, Suárez y su tenis de seda silenciaron a la Rod Laver Arena, que soñaba con una australiana en cuartos de final por primera vez desde 2009. La española ganó por 0-6, 6-3 y 6-2. Suárez, que fue capaz de reponerse al set en blanco que logró su rival en el inicio, se enfrentará ahora a la polaca Agnieszka Radwanska. “Fue difícil porque jugaba contra una multitud que apoyaba a la jugadora local”, dijo la canaria, de 29 años, que no alcanzaba los cuartos en el primer grande del año desde su debut en 2009.

Gavrilova, nacida en Moscú hace 21 años y nacionalizada australiana, se había convertido en una de las sensaciones del torneo, tras derrotar a la checa Petra Kvitova (6) y a la francesa Kristina Mladenovic (28). Impulsada por sus actuaciones precedentes, arrasó a Suárez en una primera manga impecable. Pero la española no se dejó intimidar, exhibió su variedad de golpes e hizo valer su experiencia ante una tenista a la que la presión se le volvió en su contra.

Además la estadounidense Serena Williams, primera cabeza de serie, arrolló a la rusa Margarita Gasparyan por 6-2 y 6-1. La campeona de la pasada edición se medirá en cuartos a la que fue entonces su rival en la final, la rusa Maria Sharapova (5), que poco antes tuvo que batallar contra la joven suiza Belinda Bencic (12) hasta imponerse por un doble 7-5.

Williams, que dijo desconocer el nombre de su próxima rival, parte como favorita contra la rusa, que no le gana desde 2004 en los 18 partidos que han jugado.