En el debut de Sergio Batista como entrenador de Talleres, el conjunto cordobés demolió a Huracán: le ganó 5-0 y salió de la Zona de Promoción en la tabla de los promedios. El partido quedó definido en el primer tiempo, en el que Talleres jugó 30 minutos de alto vuelo, con actuaciones destacadas de La Paglia y Quinteros, sumamente beneficiados por el pobre estado físico del conjunto visitante. Talleres hizo más goles en este partido que en los ocho anteriores, en los que sólo había convertido cuatro tantos...
Muy temprano se inició la goleada. Fue cuando La Paglia empalmó un pelotazo que Quinteros había estrellado en el poste izquierdo del arco de Ríos. La prematura ventaja no tranquilizó a Talleres, que continuó atacando con ambición, controlando la pelota y capitalizando los errores defensivos del equipo de Parque Patricios.
Así, con insólita comodidad, Quinteros marcó el segundo con remate alto, eligiendo el sitio donde colocar la pelota, sin ser molestado dentro del área rival; mientras en el tercero demostró su notable calidad para definir. Huracán no lograba reaccionar y el cuarto gol no sorprendió: González ganó el rebote de un cabezazo de Quinteros en el poste derecho del arco visitante.
En la segunda parte, Huracán compartió en algunos pasajes la pelota con Talleres, pero careció de profundidad para descontar. Los cordobeses prefirieron contragolpear, y de esa manera llegó el quinto tanto, cuando Real eludió a Morquio y a Lobos para luego definir con un toque suave ante la salida del indefenso Ríos.
“A Huracán le tocó perder porque nosotros tuvimos una gran jornada, pero nuestro rival es un buen equipo, más allá de que jugó un poco mal”, opinó diplomáticamente Batista. Su colega Babington fue más lacónico: “No hace falta comentar nada, no tengo ganas de hablar”.