SE VENIA LA NOCHE PARA TABAREZ PERO LLEGO EL EMPATE Y EL AIRE
Boca respira pese a todo
Empate justo con arbitraje pobre de Bassi. Llovió mucho y hubo un emotivo complemento tras un primer tiempo muy opaco. Sacripanti sacó ventaja de un error de Abbondanzieri y empató Tevez tras gran jugada de Delgado. Fue expulsado Battaglia y Cascini se enojó con Tabárez cuando lo sacó.
Con apenas un solo tiempo de juego aceptable y emotivo –el del complemento, porque el primero fue casi devorado por una intensa lluvia, las patinadas y el abuso de pelotazos–, Boca consiguió ayer un empate por 1-1 frente Newell’s, en Rosario, pero no logró despejar del todo las dudas que pesan sobre el equipo y crecen partido tras partido. El técnico Oscar Tabárez acertó con los cambios cuando Boca estaba abajo en el marcador, el equipo empató e incluso pareció que podía ganarlo, pero sufrió la expulsión de Sebastián Battaglia y se le complicaron las cosas. Por oportunidades, los dos conjuntos pudieron llevarse la victoria, pero fallaron demasiado en la definición.
De la primera etapa no quedó casi nada en claro. Porque llovió tanto en Rosario, que lo único que se podía apreciar eran las patinadas, los choques reiterados entre jugadores y muchos pelotazos largos, que casi siempre fueron controlados por los defensores. A juzgar por las situaciones más o menos claras, Boca había estado más cerca, aunque por la claridad de producción futbolera, los locales hicieron algo más.
Boca tuvo chances con Matías Donnet (remate franco muy desviado), Diego Crosa (un cabezazo que terminó pegando en la cara superior del travesaño), Héctor Bracamonte (encontró solito un rebote de Oscar Passet y cabeceó desviado) y Marcelo Delgado (remató pero tapó el arquero; el rebote lo agarró Tevez, que enseguida perdió ante la marca de los locales). Para los rosarinos, estuvieron cerca Sebastián Domínguez (centro y cabezazo que frenó Cascini debajo del arco) y Fernando Bellusci (recibió en el área y fue derribado por Abbondanzieri). Gustavo Bassi no vio el clarísimo penal. Después compensaría, en el complemento, comiéndose otro muy claro a Burdisso.
Pero la segunda etapa valió la pena. En el inicio –la lluvia se había detenido–, Sacrispanti estuvo cerca de anotar, tras un centro de Saucedo, y unos minutos después, a los 54, abrió el marcador luego de una gran jugada de Damián Manso, que remató cruzado ganándole a Burdisso, Abbondanzieri no pudo controlar y el centrodelantero puso el 1-0. Newell’s eligió aguantar ese resultado y Tabárez, obligado por la derrota parcial, decidió sacar a Cascini y darle más juego a la zona de volantes con Ezequiel González. Y el empate llegó con un cabezazo de Tevez, quien encontró el rebote tras un violento disparo de Delgado en el travesaño que había descolocado a Passet.
Cuando Boca comenzaba a cobrar protagonismo, perdió a Battaglia (doble amarilla) y las buenas intenciones se esfumaron. Por el lado de Manso, los rosarinos ganaron algo de confianza, pero eso no le alcanzó por las fallas en la zona de definición. Boca también contó con algunas chances más que tampoco prosperaron. La igualdad final fue justa.
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