La nueva era del vóleibol argentino también comenzó a dar señales positivas desde abajo. Como para no ser menos que el conjunto mayor, el seleccionado juvenil de la misma manera hizo historia en este 2009, luego de obtener ayer la medalla de bronce (foto) en el Mundial de la categoría que se disputó en India. Esta fue la mejor ubicación de la Argentina después del cuarto puesto conseguido en Rosario, en 1993. Los chicos derrotaron 3-0 al local, con parciales de 25-19, 25-16 y 25-22. El conjunto dirigido por Juan Manuel Cichello, que ya había superado a India en la fase previa, no tuvo complicaciones para imponerse en el encuentro que definió el último escalón del podio.

Pero el resultado es la consecuencia del trabajo que viene realizando este cuerpo técnico, debido a que el año pasado lograron resultados sorprendentes, como vencer a una potencia como Brasil en los Sudamericanos, tanto en menores de 21 años como en el Sub-18. Precisamente los brasileños se consagraron campeones después de un ajustado 3-2 (30-28, 21-25, 25-22, 23-25 y 15-8) sobre Cuba.

La proyección de nuevas promesas sigue dando resultado, debido a que este equipo contó con la presencia clave de dos jugadores que ya integran el plantel de mayores: Facundo Conte y Nicolás Uriarte. Ellos dos, hijos de los históricos Hugo y Jon, respectivamente, fueron la base donde se apoyó toda la estructura. Otro de los destacados de la campaña fue el chaqueño Franco López, distinguido como el mejor defensor y el mejor líbero del campeonato. Sin duda, la continuidad en las tareas fue decisiva, debido a que en 2005 el seleccionado de menores (con Luciano De Cecco y Rodrigo Quiroga, hoy en el plantel superior, el segundo como capitán) fue cuarto en el Mundial de Argelia, y luego esa misma camada fue quinta en el Mundial juvenil de Marruecos 2007.

Cuando Uriarte se alejó del conjunto superior para dejarle el lugar a Javier Weber, también se especuló con modificaciones entre los conductores de los seleccionados menores, pero la determinación de dejar en sus puestos a Cichello y su equipo fue vital para que todo lo comenzado comenzara a plasmarse.

En la victoria de ayer sobre la India se destacó el aporte de tres goleadores: Conte, con 13 puntos; Pablo Crer y Pablo Hruby, ambos con 10.

Argentina sacó ventajas en el primer set con el aporte de los centrales y su buena resolución en las acciones de contraataque. En el segundo parcial el equipo aprovechó el desconcierto de su rival, y por momentos marcó amplias diferencias. En el último set, los juveniles mantuvieron la intensidad en su juego e India colaboró con los errores en el saque.

Por su parte, el poderío de Brasil continúa, debido a que el de ayer fue el cuarto título mundial juvenil, ya que se había consagrado en Rosario 1993, Wroclaw (Polonia) 2001, y Casablanca (Marruecos) 2007.