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Desde Londres

Los británicos son maestros a la hora de cultivar sus tradiciones. Los Juegos Olímpicos no serán su invención, pero ya forman parte de su herencia cultural. La organización encargada de velar por la conservación de los tesoros culturales, la English Heritage, acaba de publicar un libro, Los Juegos Olímpicos Británicos: la herencia británica de las Olimpíadas, que explora la historia de los Juegos desde su invención en Grecia hasta su redescubrimiento en Inglaterra y su actual realización en Londres. Según el historiador Martin Polley, autor del libro, “la fascinación británica desempeñó un papel crucial en los Juegos tal como los conocemos hoy”. A continuación, una selección de 10 hechos rescatados por el libro de esta tradición olímpica.

1. William Shakespeare fue el primero en usar la palabra “Olímpico” (“olympian”). Como en tantas otras cosas británicas, Shakespeare siempre está presente. Fue en Enrique IV en el verso Promise them such rewards, as victors wear the Olympian games (“Prométanles recompensas como las que los vencedores usan en los Juegos Olímpicos”).

2. El primer evento olímpico después de la antigüedad fue en Chipping Camden, sudoeste de Inglaterra, en 1612. Exactamente 400 años antes de las Juegos de 2012, los ingleses decidieron revivir esta tradición que, como venía de la antigüedad, fascinaba al Renacimiento.

3. En 1865 se fundó la Asociación Olímpica Nacional. El objetivo de la Asociación era la realización de Juegos Olímpicos a nivel nacional. La sede de estos Juegos pasaría de una ciudad a otra.

4. En 1866 se realizaron los primeros Juegos Olímpicos Nacionales. Este evento a nivel nacional no duraría mucho. En 1883 se jugarían los últimos, en Hadley, al este de Inglaterra. La internacionalización de los Juegos estaba a un paso.

5. El aristócrata francés Pierre de Coubertin funda en 1894 el Comité Internacional de los Juegos Olímpicos. El Barón propuso Citius, Altius, Fortius (“Más rápido, más alto, más fuerte”) como el lema de los Juegos y los cinco aros olímpicos como “las cinco partes del mundo”. Pero era un mundo conformado por varones.

6. Hasta que, en 1900, los Juegos de París incluyen a mujeres y la primera ganadora de un premio fue inglesa. Fue la tenista Charlotte Cooper, de Ealing, en el este de Londres. El premio que se llevó no fue una medalla: fue una pintura. La participación de mujeres no eliminó la segregación de los sexos a nivel deportivo. Los deportes ecuestres son los únicos en los que compiten hombres y mujeres.

7. Los primeros Juegos Olímpicos en Londres fueron en 1908. Hubo 109 eventos, 2023 atletas y 23 países. Por primera vez hubo competencias de piscina. Según la prensa, “clima más miserable es difícil de imaginar”. Comenzó con la ceremonia de inauguración: llovió a cántaros. Los Juegos actuales todavía están en carrera para la de “clima más miserable”. La inauguración se salvó por un pelo de correr la misma suerte que en 1908, pero ha habido unas cuantas tormentas y todavía quedan suficientes días para pasar a la delantera.

8. La primera Antorcha Olímpica se vio en los Juegos Olímpicos de Berlín en 1936. La antorcha partió de Atenas y cruzó Bulgaria, Yugoslavia, Hungría, Austria y Checoslovaquia antes de llegar a Berlín, en los Juegos políticamente más contaminados de la historia, con Adolf Hitler en el poder y a un paso de la Segunda Guerra Mundial.

9. Los primeros Juegos de la posguerra fueron en Londres en 1948. Apodados los Juegos de la Austeridad por las condiciones de la posguerra, ganaron dinero con el paso del tiempo. En 2008, la antorcha de esos Juegos se vendió en una subasta en Bonhams por 2520 libras esterlinas.

10. Wembley Arena es el único estadio de 1948 que se ha usado en estos Juegos. La distinción no parece haberle servido mucho. En la historia futura, el estadio quedará seguramente más asociado al escándalo protagonizado por los equipos femeninos de badminton de China y Corea del Sur.