Hace una semana, cuando Boca le ganó a Quilmes y alcanzó por primera vez la punta en un campeonato camaleónico, los hinchas boquenses apretaban el acelerador del entusiasmo pensando que habían entrado en la autopista que conducía a un nuevo título. El panorama varió notablemente con el empate ante Tiro Federal y la victoria de River ante Olimpo. La frustración del empate sumada al triunfo de los de Passarella generaron una corriente de pesimismo que seguramente se agrandará en la medida en que revisen el fixture. A Boca le falta jugar con River, Newell’s, Banfield, Colón, Arsenal, Vélez, Estudiantes, Independiente y Olimpo. Nada menos. Y a River, que la tiene mucho más fácil, le faltan Boca, Central, Lanús, Instituto, San Lorenzo, Argentinos, Gimnasia y Esgrima, Racing y Quilmes. De todos modos, lo que importa por ahora es lo inmediato, el mano a mano de los primos la semana que viene.

Lo ocurrido en la tarde del domingo deja una conclusión clarísima: River llega mejor que Boca al superclásico. Está puntero y podrá hacer un buen negocio con el empate en la Bombonera, que no variará las posiciones en el pica-pica; logró un triunfo clarísimo con los bahienses y levantó la autoestima a la altura de su ubicación en el torneo.

Hace una semana, Basile había declarado que Boca está muy acostumbrado a sostener la punta, pero el empate en Rosario sonó como un directo de nocaut para derrumbar aquella afirmación. Poquito le duró el liderazgo a Boca, aunque le queda el consuelo de que en este campeonato todos se apunan. Alternativamente fueron punteros: River, Estudiantes, Banfield, Newell’s, Gimnasia de Jujuy, Colón (3 puntos); Estudiantes (6); Independiente, Estudiantes y Colón (7); Colón (10); Estudiantes, Vélez y Colón (11); River (13); Colón (15); River y Newell’s (17); Boca (19) y River (21).

Basile puso lo mejor que tiene contra Tiro Federal, aun arriesgando a Ibarra, Daniel Díaz y Ledesma, que tienen cuatro amarillas y podían perderse el clásico si les sacaban una más. No hubo amarillas y ése es un pequeño punto a favor. Pero el ensayo general no funcionó. Faltó solidez en el fondo y más contundencia arriba. Si juega así contra River no le va a ir nada bien.

Passarella jugó con suplentes. Seguramente el domingo entrarán Lux, Ferrari, Domínguez, Santana, Ahumada, Gallardo y Farías. Otro equipo. Pero la clave podrá ser Montenegro, que ayer una vez más la rompió.

River llega mejor parado y dispuesto a terminar con eso de que el que alcanza la punta se cae rápidamente.