Un nuevo hecho de violencia volvió a protagonizar la barra brava de River. En este caso, el acontecimiento más grave se produjo antes el comienzo del partido ante Arsenal, en el centro la tribuna local, y también detrás de ese sitio. Cuando un grupo se encontraba en la popular esperando el partido, otro ingresó por uno de los accesos y rápidamente se acercó a la zona media para desalojar al resto a los golpes. Según versiones, los que llegaron primero serían los del “Oeste”, y los que entraron después pertenecerían a la banda de Adrián Rousseau. El saldo fue seis hinchas heridos, uno de ellos en “estado desesperante”, dos policías lesionados y 38 detenidos. El director del SAME, Alberto Crescenti, dijo que ese servicio trasladó a tres hombres al hospital Vélez Sarsfield, uno de ellos con un “traumatismo encefalocraneal grave” llevado luego al Fernández, donde quedó entubado para ser sometido a una tomografía computada.

Además, un herido de arma blanca se negó a ser trasladado y dos hinchas fueron atendidos en el lugar, mientras que fuentes policiales señalaron que dos efectivos sufrieron “traumatismos”. Entre los detenidos antes, durante y después de la violenta tarde en Liniers, hay uno que habría sido identificado por las cámaras del estadio participando de la pelea. Luego de ese enfrentamiento, los hinchas que se ubicaban en la platea repudiaron el hecho al grito de “váyanse todos la p... que los parió”.