El equipo peruano llegó a esta serie de partidos de Eliminatorias con la pesada carga de haber sido considerado por la FIFA como el peor equipo de Sudamérica. Es que su marcha en el actual torneo sudamericano de selecciones lejos está de ser óptima, más allá del pequeño recupero que le significó haber ganado el sábado por la noche 1-0 en Lima su partido por la séptima fecha ante Venezuela; un poco de cicatrizante para la herida que le abrió Uruguay con su histórica goleada por 6-0.

Si bien el triunfo volvió a encenderle la ilusión, lo cierto es que este Perú está lejos, muy lejos de aquel equipo que supo brillar a finales de los años ’70 y principios de los ’80, cuando con Uribe, Oblitas, Cueto, Chumpitaz y Cubillas, entre otros, consiguió clasificarse para los mundiales de Argentina ’78 y España ’82.

Los malos resultados conseguidos en los últimos años han vuelto a Perú un seleccionado accesible para la mayoría de los equipos fuertes de Sudamérica. Lo saben sus jugadores y no lo ocultan. Prueba de ello son las palabras del capitán del equipo, Nolberto Solano, quien en la previa al partido frente a los venezolanos apuró con que en caso de que su equipo no consiga cuatro puntos de los últimos seis en juego, difícilmente continúe jugando el resto de las Eliminatorias. “Esto empezó mal, pasaron muchas cosas y éstos son los resultados”, manifestó el ex Boca, quien admitió así la posibilidad de dar un paso al costado. Para colmo, está en duda para el miércoles.

Lo cierto es que el equipo peruano ni siquiera entusiasma a sus hinchas. Y ése es otro de los desafíos que tiene por delante su entrenador, José Guillermo “Chemo” Del Solar, quien está intentando realizar un recambio generacional en el equipo, incluyendo algunos nuevos valores, como pueden ser los debutantes Johan Fano y Orlando Contreras.

Los que ya no están en el equipo son algunos de los históricos como Pizarro, Farfán y Acasiete, quienes fueron excluidos del plantel por el Chemo Del Solar, quien ahora espera que los resultados no traicionen sus decisiones determinantes.

Sin grandes intérpretes, las oportunidades del equipo peruano se presentan a priori limitadas. Quizá por eso una de las armas principales de este equipo sean las jugadas de pelota detenida. Es que si hay algo que el equipo rojiblanco cuenta a su favor es con el buen pie de algunos de sus jugadores.

De hecho, en la previa a esta seguidilla de partidos, Del Solar ensayó disparos de tiro libre, al parecer el recurso más efectivo que encuentra el DT para que su equipo pueda llegar al gol. Solano, Juan Vargas, Fano y La Rosa, con distintos estilos y potencias, los posibles ejecutores.

Los números negativos que cosechó en estas primeras siete fechas de Eliminatorias hablan por sí solos. Apenas cuatro goles a favor en siete partidos y 15 goles en contra.

Claro que la victoria frente a la “vinotinto” puede representarle un envión anímico importante de cara al encuentro frente al equipo argentino. Es que, con el triunfo, los peruanos al menos dejaron de ser la cenicienta del torneo, superando ahora por dos unidades a Bolivia. Pero nada está dicho aún. Recién habrá tiempo para realizar un nuevo balance cuando concluya la octava fecha del torneo.

Hasta entonces, Del Solar tendrá tiempo para disfrutar de su primera victoria y para seguir trabajando con sus dirigidos, buscando un camino más seguro que, al menos, los acerque a soñar con un pasaje mundialista.