España, defensor del título, jugará por novena ocasión la final de la Copa Davis de tenis, luego de eliminar ayer a Estados Unidos, máximo ganador histórico, sobre polvo de ladrillo en Gijón. El local David Ferrer, número 5 del mundo, aseguró el boleto con su triunfo sobre John Isner por 6-7, 6-3, 6-4 y 6-2, que dejó el marcador en 3-1. Sin Rafael Nadal, lesionado, los campeones garantizaron su clasificación con los singlistas (Ferrer y Nicolás Almagro) y sólo perdieron el doble ante la pareja de los hermanos Bob y Mike Bryan, líderes del ranking mundial. España llegó a la instancia decisiva por cuarta vez en el último lustro. Los españoles fueron campeones en 2000, 2004, 2008, 2009 y 2011 y también jugaron la final en 1965, 1967 y 2003. Dos de sus títulos los consiguieron ante Argentina: de visitante en Mar del Plata en 2008 y como locales en Sevilla, el año pasado. Por otra parte, Suecia, Rusia y Japón perdieron sus repechajes, por lo que abandonaron el Grupo Mundial de la Copa Davis, mientras que Bélgica, Brasil e Israel, respectivamente, ascendieron a la elite. También permanecerán en el grupo mundial Suiza, Alemania, Italia y Canadá.