GORE VIDAL: “No soy virólogo”
No todos los intelectuales de fuste se han sentido obligados a hablar del tema. En este sentido, se destaca el caso del legendario Gore Vidal. En una entrevista de 1992 Larry Kramer le puntualiza casi un reproche:
Kramer: Usted no ha hablado mucho del sida.
Vidal: No soy virólogo.
Kramer: No, pero debe haber perdido a muchos amigos o conocidos o lo que sea. Y, aparte de todo, es un fenómeno.
Vidal: Es un fenómeno siempre presente, desde luego, pero no soy de los que se preocupan por todo. Si no tengo nada provechoso que decir, ¿qué voy a decir? Por supuesto que es terrible. El sida no me ha tocado de cerca salvo en mi propia familia. Tengo un sobrino de veintinueve años, hijo de mi hermana, que es el único miembro con talento de su generación en mi familia. Hugh Steers, seguramente conocerá sus cuadros. Pinta gente con sida. Hace ocho años, creo, que lo diagnosticaron, y tiene veintinueve, y eso ha hecho que me concientice de manera dramática.
Kramer: ¿No es motivo para que escriba usted un ensayo con mucha fuerza y furia sobre lo que este país no ha hecho para salvar la vida de este joven?
Vidal: Supongo que sí. Pero ¿no cree que es mejor que ataque el estado de la seguridad nacional que ha dado lugar a una especie de Estado policial? ¿No es mejor que ataque al Tribunal Supremo que nos arrebata nuestros derechos? ¿Y no es mejor que ataque a Jesucristo y a Moisés, que son los responsables de la mentalidad que lo ha hecho posible? Soy radical, lo que significa que voy a las raíces.