libros

Domingo, 15 de mayo de 2016

> Poemas inéditos y no fechados de Sola González

Los complotados

No hablaron por teléfono, no dejaron la urna en la ventana,
sólo un dedal calzaba el dedo al inocente.
Ahora duermen un poco más abajo.
Sobre ellos caminan
las señoras, los jueces
y el luto y la copa de flores.
Ellos abajo con tierra entre los dientes
discuten en los pasillos del motín,
la explosión grande,
la lepra clara sobre el mundo.


Hijos del pueblo (fragmento)

Tal vez nos pongamos de acuerdo
Si usted conoce algo eternamente calcinado,
Algo de Gog y Magog,
Algo del trono sepultado en el fondo del mar,
Si usted cree, como yo, que la poesía ha muerto
(rajá, turrito, rajá)
En la mierda sagrada de los citaristas.
Si usted cree que arremangándose y llorando
Puede aún rescatar en los pantanos de la belleza
Los huesos adorables de un soneto
Y con ellos levantar una casa escondida,
Un quilombo fantástico de ángeles.

Si usted cree, yo creo.
Y eso sí, compañero, hay que pisar las flores
Y sacarse la cera de Ulises, el de sucias orejas;
Porque ya las sirenas duermen en los castillos de los ojos del mar
Y el canto es, ahora, el aullido sin tregua de los hijos del pueblo.


Música entre pérgolas

¿Qué son las pérgolas esdrújulas?
¿Jardines sin señoras, avellanas
en la mano de los pobres,
o sombreros flotando en un río de aire?
¿O solamente eso, las palabras, las pérgolas?


(sin título)

Por los que en la noche esperan en las terminales
el ómnibus que no saldrá nunca,
por los que duermen en las Salas de Espera
de las Terminales abrazados a sus muletas,
por el amante que se va en el de las 2.05,
por el amante que se queda,
por el que golpea en la puerta del bar
y el bar está cerrado,
por los que no pueden pagar un taxi
y caminan bajo las estrellas hasta el amanecer,
te pedimos, oh Sol, padre de las diligencias
que parten al alba,
que no salgas nunca más.

Compartir: 

Twitter

SUBNOTAS
  • > Poemas inéditos y no fechados de Sola González
 
RADAR LIBROS
 indice
  • Nota de tapa
    COLORES SECRETOS
    En los años 40 lo llamaban El Príncipe, un joven delgado y rubio que publicaba poco, prefería...
    Por Daniel Freidemberg
  • LEóN TROTSKI Y ANDRé BRETON
    SURREALISMO Y REVOLUCIÓN
    Por Eduardo Grüner
  • MARIANA ENRIQUEZ
    LA CASA EQUIVOCADA
    Por Liliana Viola
  • ANDRéS NEUMAN
    VOLVER O REGRESAR
    Por Mara Laporte

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.