Al fin hubo novedades sobre la notable confitería de Callao y Rivadavia, con el Senado votando su expropiación.
› Por Sergio Kiernan
Aunque ya estaba para Sigmund Freud, el tema de la Confitería del Molino parece que puede resolverse al fin. Este jueves, el Senado le dio media sanción al esperado, muy esperado, proyecto de expropiación del maravilloso edificio. Esta obra maestra de la fantasía porteña lleva décadas cerrado y sucio, transformado en una muestra inocultable de nuestra desidia.
Los memoriosos recuerdan con un amor especial los interiores del edificio que arrancó como boutade de panaderos que reemplazaron su local de esquina con uno de los símbolos porteños. Para abajo, El Molino se va en subsuelos que alojan una verdadera fábrica panadera que en sus tiempos abastecía la confitería de planta baja, muchas oficinas cercanas, más de un bar y al mismo Congreso, cuyas cámaras recibían tandas de medialunas dos veces al día. El bar de la esquina era como una tercera cámara donde hacer política al pie de lo que debe ser la más hermosa escalera que tiene Buenos Aires, realizada como una ola de agua en tono marfil que desciende del entrepiso llevando nereidas.
Para arriba, el edificio en estilo... ¿Art Nouveau? se va en un salón de actos y muchos departamentos cuyos interiores no le llegan al magnífico exterior, pero están realizados con la calidad de hace un siglo. Todo el conjunto puede ser recuperado para uso legislativo y la confitería, reabierta. Será uno de esos casos en que el Congreso Nacional les da una alegría directa a sus representados.
El mismo jueves feliz en que se votó esto se votó también crear un Distrito Histórico en la bella ciudad de Goya, el puerto correntino sobre el Paraná que guarda un patrimonio notable por su coherencia estilística y cronológica. A quien le parezca raro que sea el Senado el que crea lo que finalmente es un APH de 21 manzanas se le puede señalar que el proyecto tuvo mucha resistencia de los arquitectos correntinos, que siguen pensando que demoler es progreso, y no entusiasmó mucho a los gobiernos locales involucrados. Se supo por fuentes buenas que el patrimonio de Goya encontró un hada madrina en Balcarce 50, que destrabó la cosa.
Algo por el estilo ocurrió también en la Legislatura porteña, donde el proyecto de ley para ampliar el APH1 San Telmo con una sólida zona de amortiguación dormía el sueño de los justos, con muchos esperando que perdiera estado parlamentario a fin de año. El autor del proyecto, el ex diputado y actual funcionario del Ejecutivo Patricio Di Stefano, recorrió pasillos, rogó, pidió, negoció, convenció y el proyecto fue tratado el jueves en reunión de asesores. Di Stefano presidió la Comisión de Patrimonio que fundara Teresa de Anchorena y se despidió el año pasado ampliando el APH del Centro de San Telmo a Plaza San Martín.
El martes 11 de diciembre se realiza la audiencia pública en la Legislatura sobre la ley que permite la construcción de edificios en las ex playas ferroviarias de Caballito, Liniers y Palermo. Como se sabe, la ley de doble lectura fue votada a libro cerrado y de apuro en este noviembre que termina, pero tiene que pasar por las audiencias públicas para su segundo voto. Quienes quieran inscribirse para ser oídos en el Salón Perón, el 11 a las 15 horas, en Perú 160, pueden hacerlo hasta el día 6 personalmente en la Dirección de Participación Ciudadana de la Legislatura de 11 a 17, o por Internet en www.legislatura.gov.ar/audi.php, sobre el proyecto “Rezonificación de predios desafectados del uso ferroviario de la calle Niceto Vega y otras, Expte. Nº 3194-D-2012 Comisión de Planeamiento Urbano”.
Otra iniciativa para los vecinos hace a la verdadera masacre de árboles que está llevando a cabo el ministerio que dirige el inefable Diego Santilli. Por toda la ciudad se pueden ver unas camionetitas con un adhesivo de la Ciudad pegado, llevando personal obviamente no capacitado para hacer podas que les dan a los árboles sin ton ni son. Que Santilli autorice podas en plena primavera casi verano ya demuestra que si tiene quinta no la atiende y además no sabe asesorarse. Pero que los “podadores” mutilen los árboles hasta el tronco prueba que ellos tampoco tienen idea de lo que están haciendo.
La propuesta es documentar esta barbarie ya, hacer un mapa de los árboles mutilados enviando fotos a [email protected] o a [email protected]. Como la idea es hacer un registro real, hace falta incluir la dirección de la batalla y la fecha.
Este martes a las 19 hay una conferencia que vale la pena: el programa de Preservación y Conservación del Patrimonio que coordina Fabio Grementieri en la Universidad Torcuato Di Tella invitó al especialista en materiales Antoine Amarger a dar una charla-clase. Con un carrerón de 25 años, Amarger es uno de los referentes internacionales en el tratamiento de materiales, y este martes hablará del “metal monumental” en escultura, arquitectura y decoración. Amarger tiene una amplia experiencia reflejada en trabajos para los museos Picasso, Matisse, Rodin y de Arte Moderno de Francia, y encargos como la restauración de esculturas en el palacio de Versailles, entre muchas otras. La actividad es gratuita, pero requiere inscripción previa en [email protected].
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