Hoy abre la muestra en el Museo Sívori del maestro Lorenzo Gigli, pintor italiano que se hizo argentino y enseñó dibujo a generaciones de artistas y de arquitectos. La muestra organizada por su nieto, el arquitecto Matías, toma la rica época de San Fernando, cuando Gigli se jubiló en 1956, vendió su casa en la Capital y se mudó al entonces medio rural barrio del norte. Menos conocido de lo que se merece, Gigli dedicó esos años a pintar y a la escultura, lo que la muestra recoge con piezas que permiten entender los recursos del artistas: la barra de grafito y la espátula de pintura, el metal y el balde de cemento. De paso, la exhibición funciona como un testimonio de un paisaje en transición entre el campo y la ciudad, que Gigli retrató con un realismo creativo.