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A lo Cyndi Lauper cuando pregonaba que “las chicas sólo quieren divertirse”, las diseñadoras gráficas y hermanas Noelia y Natalia Rastelli, de la ciudad de Campana, decidieron abandonar la rutina de los trabajos para clientes por el emprendimiento propio. Siguiendo una pasión personal y el instinto de que era un gran nicho por explorar, se abocaron a crear papeles estampados para todo tipo de actividades decorativas o artísticas, desde origami, pasando por scrapbook, encuadernación, tarjetería, decoupage o simplemente para coleccionar.

Una de las señas particulares del producto es que está diseñado por reconocidos ilustradores o diseñadores gráficos. Bajo la griffe Papel Picado ofrecen pliegos de 50x70 en 90 y 240 gramos, cortes más pequeños que vienen en packs y productos que utilizan los papeles como materia prima para sobres, guirnaldas de luces, lápices forrados y anotadores.

“Somos hermanas, diseñadoras gráficas y socias. Durante más de quince años trabajamos desde nuestro estudio de diseño brindando servicios a empresas. Un poco cansadas del trabajo rutinario, de reuniones formales y de tantas horas en la computadora empezamos a buscar una vuelta al trabajo manual y artesanal haciendo encuadernación, origami y lettering. Fue así que buscando lindos papeles para trabajar nos encontramos con que había muy poco. Siempre mirábamos las páginas del exterior asombradas y queriendo tenerlo todo. Entonces pensamos: ¿Pero por qué no? ¿Por qué no crear esa línea de papeles soñada? Así nació Papel picado en 2014.

Teníamos en claro que los papeles tenían que ser grandes porque ya existía cierta variedad en cortes pequeños para origami. Por lo tanto, ese sería uno de nuestros distintivos: los pliegos. El otro son los diseños originales de autor, para llegar a un público más interesado en el diseño, con piezas únicas. Así cada pliego sería una obra de arte en sí misma. Todos los años incorporamos nuevos diseños e ilustradores. La idea es ir discontinuando lo más viejos y cambiar para que aquellos que trabajan con papel no se aburran. Comenzamos con 10 diseños en el 2014, hoy tenemos 23 y estamos armando una nueva tirada para fin de año.”

–¿Cómo hacen la selección de los profesionales del diseño?

–La selección de diseñadores para intervenir los papeles es en principio caprichosa o arbitraria porque elegimos aquellos que nos gustan o nos motivan a nosotras. Nuestros inspiradores son Mundobu, Anto Del Vecchio, Ana Sanfelippo, Laura Varsky, Pupé, Celeste Aires, Yani & Guille, Rëgina, Mariano Tello y Gabi Piserchia que se sumaron al proyecto con muy buena onda. Para la creación de los patterns en algunos casos planteamos una idea puntual a desarrollar porque creemos que falta o porque puede resultar llamativa y en otros casos son los ilustradores quienes libremente crean o diseñan. Tratamos de ser super cuidadosas en la calidad y terminación, así que seleccionamos una imprenta excelente con la que ya trabajábamos y todo, absolutamente todo es de producción nacional. Nuestros principales clientes mayoristas son librerías o artísticas, aunque también tiendas de diseño o deco que están ampliando su propuesta. En el público minorista son muy solicitados para encuadernación, es la actividad por la que más consultas recibimos. Nos llena de energía recibir todo el tiempo mensajes y fotos de los trabajos que hacen y respondemos cada uno con el mismo esmero. Tanto cariño recibido nos hace pensar que vamos por el buen camino. Somos un mundo de papel soñado, somos historias que se cuentan en papel, somos arte al alcance de la mano.

–¿Qué fue lo más difícil a la hora de emprender?

–En nuestro caso fue desarrollar la venta de productos ya que siempre nos dedicamos a brindar servicios y era toda una organización nueva de tiempos, estrategias de marketing y financiera. No tanto la parte de producción porque al trabajar como diseñadoras gráficas ya teníamos muy incorporado el proceso, proveedores, calidades, tiempos. Creemos que no está tan incorporado el universo papelero pero sí creciendo cada vez más en Argentina el amor y culto hacia los papeles, todos los productos de papelería y escritorio y que se está volviendo al trabajo artesanal, a los mensajes a mano. La mayoría del público que ama los papeles y se acerca se asombra de que haya tanta variedad y casi siempre nos comentan que los traían de viajes al exterior. Para nosotras es un orgullo que esos mismos clientes también elijan los nuestros.