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Por Matías Gigli

El sótano del Centro Cultural de España en Buenos Aires acaba de ser remodelado. Clorindo Testa, su autor, volvió a intervenir en su obra, que data de 1988. En la estratégica ubicación de Florida 943, el local es un buen ejemplo de cuánto se puede hacer bajo el nivel de la calle, casi sin comunicación con el mundo exterior, pero sin pasar desapercibido. Ahora acaba de adaptar su espacio a nuevas funciones. Con esta intervención, el CCEBA ganó un espacio de exposición en el acceso y una imagen blanca.
Con un concepto de espacio dinámico, cambiante y multifacético, se concentran actividades que difícilmente alguien pueda imaginar al pasar por la peatonal. El espacio es interesante y las actividades albergan la confluencia de una nueva imagen para el centro, con la intención de mostrar una España con arte de vanguardia y desacartonado en nuestra ciudad. Dividido con rieles de los que se cuelgan paneles, se organizan distintas formas de definir los ámbitos de encuentro.
El centro recuerda a una cripta medieval, todo sucede abajo: una escalera desciende hacia las actividades, una planta estrecha es el paso obligado a los lugares de encuentro. Desde la calle, hay que caminar atento, el ancho del local es mínimo. Un frente que ahora cuenta con un espacio para exponer se explica desde la organización del acceso-vidriera. Con una gráfica renovada, mucho blanco y vidrio, el CCEBA avisa que algo está pasando abajo.
El multiespacio tiene resumidas en su superficie nuevas funciones acordes a los soportes visuales actuales: una mediateca compuesta por una biblioteca, videoteca, sonoteca, hemeroteca y máquinas para consultar internet. Además hay dos puntos de encuentro: el A destinado a música experimental y videoarte, el B está para escuchar demos o primeros discos de música popular, rock y jazz, y a un espacio de revistas culturales. El centro cuenta además con un rincón para leer los diarios españoles y organiza actividades como presentaciones de libros, conciertos, encuentros de poesía, performance y vernissages.
Ahora que está probado todo lo que se puede hacer con casi nada de espacio, sería bueno que desde el CCEBA haya un próximo paso que sume metros al proyecto.