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A Dick le molesta que lepregunten por su apellido. Es alto, rubio y tiene el ojo derecho desviado (parece un Kirchner holandés). Sólo se sabe que su apellido artístico es “El Demasiado”. Según dice, es porque exige luz verde todo el tiempo. “Ser diplomático no conduce a nada. Hay que entrar como un rompehielos en todas partes”, manifiesta. Ahora, ¿quién es este raro personaje que conoce América como la palma de su mano, reivindica los extremos y se burla del poder y de Occidente? En principio, se asume como parte elemental de la cumbia lunática-experimental. “Cuando vomitás en el suelo, el vómito tiene aspecto de luna llena, se forma un círculo con relieves muy parecidos a ella. La cumbia lunática es eso: devolver exactamente lo que te entró”, sostiene mientras sonríe a medias y se acomoda su peinado. Una explicación más formal sería que el subgénero nació de un supuesto gesto antiimperialista del venezolano Padre Teresa (1947-1996) que, ofendido porque los austríacos habían robado las plumas del emperador azteca Moctezuma para el museo de Viena, transformó el “Danubio Azul” de Strauss en una pieza cumbiera. La cumbia lunática encarnó luego en jóvenes “ye-ye” peruanos (Los Minitiks, por ejemplo) y en antros como el “Verdugo de Shakespeare” de Lima, según confirma el antropólogo Ariel Goldsinger en su libro La lenta e incesante degradación de las cumbias lunáticas. “¿Por qué no secuestrar sus valses y meterlos en el patrimonio de los Wawancó?”, decía Teresa, creador de “El perro gaitero”, antes de entrarle duro al alcohol y terminar cocinando pollos en un barco.
Entonces, el objetivo de Dick El Demasiado es precisamente pasear el ejemplo reivindicatorio del Padre por “todos los márgenes del mundo” donde, según él, se da lo mejor del arte. “Holanda tiene una cultura equilibrada, justiciera, pero también aburrida. Cuando todo es posible, la vida pierde sentido dramático... No se siente la necesidad de hacer algo. En cambio, los lugares más problemáticos demandan transgresión. Allá tenemos todo, menos la nafta para encender la chispa.” La Argentina fue entonces el país elegido para el segundo Festicumex (homenaje al tal Teresa), este fin de semana en el Círculo “La Paternal” (Paz Soldán 5035). Bajo la consigna “La curiosidad es el mejor patrimonio”, gente del Centro Periférico y trabajadores de la revista Hecho en Buenos Aires presentarán a 40 músicos y artistas que irán integrando, acorde a sus condiciones, los grupos de cumbia lunática que aparecen en la grilla: Los Subdesarrollados del Norte, Hygiénica González, Los Del Fin, El Mono Tenedor, Chacletamóvil y el mismo Dick. “Será un accidente musical bien organizado. Además, que sea el 18 y 19 de octubre no es azaroso. En esos días beatifican a la Madre Teresa y resulta un contrapunto mediático interesante, porque los periodistas van a mencionar los milagros de la Madre y en cierto momento alguien va a tener que decir que en la Argentina se está homenajeando al Padre.”