Bajo el lema “Donde el golf se topa con la irreverencia y la diversión inspira estilo”, ha hecho su debut estelar una nueva línea de ropa especialmente diseñada para coquetos practicantes del mentado deporte que, además de buen hándicap, cuentan con gran sentido del humor. Después de todo, la línea es creación del mismísimo Bill Murray, cuyo nombre ahora emperifolla camisas polo, remeras, shorts, gorras, entre otros adminículos temáticos. En honor a la exactitud, es la versión más formal, y acaso paródica, de su nombre; porque la incipiente firma ha sido bautizada William Murray Golf y, según voces autorizadas, “tras presunta formalidad, esconde absoluto descaro”. Con, por ejemplo, estampados repletos de vasitos de whisky; o la silueta del actor como logo, desplazando al afamado cocodrilo, tan presente en el ajuar de golfistas.

Con apenas unas pocas mercancías a la venta (agotadas casi de inmediato), WMG lanzará oficialmente una propuesta con más y más productos a fines de octubre. “Aunque no lo supiéramos entonces, todo comenzó con Bill tirando el palo”, asegura la web theCHIVE, encargada de comercializar la flamante indumentaria. La referencia es a la icónica imagen de Murray lanzando un putter en un torneo, tras un tiro exitoso, que data de 2011. Un gesto devenido logo, al que se suma el tartán escocés que identifica al clan familiar, presente en todas y cada una de las creaciones. Creaciones no tan exuberantes como las que el mismo Bill lleva años vistiendo en los torneos amateur en los que participa, tras haberse inaugurado en el deporte siendo aún purrete, cuando juntaba unos mangos laburando de caddy (tarea que más tarde volvería a ejercer como actor, en Caddyshack, una película de 1980). Y en el que continuó ejercitándose con el correr de las décadas, creando incluso un evento anual –de golf, claro– para juntar fondos para caridad. Ahora, ropa; mañana, ¿palos? Con Bill nada parece imposible.