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El ministro de Trabajo de Nación, Carlos Tomada, dictó anoche otro cuarto intermedio en las negociaciones laborales entre la CGT San Lorenzo y las cerealeras de la región, en el marco de la conciliación obligatoria. Los representantes de las terminales portuarias del complejo agroexportador sanlorencino ofrecieron 1600 pesos, por única vez y en cuatro cuotas, para todos los empleados. Para los dirigentes gremiales es "una payasada", y rechazaron de plano la propuesta salarial.

Dirigentes de la CGT nacional, CGT San Lorenzo y los gremios Supa, Uocra y Urgara, que nucléan a trabajadores de las terminales portuarias del complejo agroexportador regional, volvieron a reunirse ayer, a las 14.30, en el Ministerio de Trabajo de la Nación, con las empresas del sector. Después de casi seis horas de negociaciones, por separado con cada parte, y con la mediación del ministro Tomada -luego lo reemplazó el subsecretario de Relaciones Laborales, Alvaro Ruiz , "no hubo acuerdo".

El secretario gremial de la CGT San Lorenzo, Edgardo Quiroga, dijo a Rosario/12 que siguen planteando "un mínimo de 5000 pesos para todos los compañeros del complejo agroexportador". Además, el gremialista aseguró: "(La parte empresarial) pretendía dividir nuestra CGT y a los trabajadores, y que cada gremio negociara por separado, pero no lo lograron".

Tras la falta de acuerdo, las partes firmaron un nuevo acta para continuar las negociaciones. La próxima audiencia será el lunes 14, a las 15, también en Buenos Aires, donde se espera "concretar una solución al conflicto", según indicó un vocero del Ministerio a este diario.

Quiroga aseguró que los dirigentes gremiales salieron "decepcionados" de la sede porteña de la cartera laboral, aunque destacaron la predisposición del ministerio para buscar solucionar el conflicto.