Desde Santa Fe

Un acuerdo político entre el Frente Progresista y el kirchnerismo santafesino logró sacar anoche de la Legislatura la reforma tributaria. La Cámara de Diputados aprobó un dictamen de consenso por 33 a 13 y lo giró al Senado que ﷓al cierre de esta edición﷓ analizaba la posibilidad de convertirlo en ley, en lo que significaba un giro de campana con lo que votó hace un mes. "Estamos satisfechos por lo que se ha sancionado. Apostamos a que sea un punto de partida para nuevos acuerdos", celebró uno de los legisladores de la UCR. La ley aumenta el revalúo de los inmuebles rurales en un 120 por ciento, aumenta el urbano en las categorías superiores y deroga el pacto fiscal para poder cobrar el impuesto a los ingresos brutos (apenas el 0,50 por ciento) a las grandes empresas que facturan más de 80 millones de pesos.

El dictamen salió en Diputados con 14 votos del Frente Progresista, 13 del Frente para la Victoria y seis del Pro, que apoyó en general. El PJ se dividió por mitades. El proyecto original que el gobernador Antonio Bonfatti envió a mediados de abril proponía aumentar la recaudación en 1.400 millones, el que sacó el Senado en julio la recortó a 850 millones y el que votó ayer la Legislatura la aumentó a 1.000 millones de pesos, más cerca del pedido de la Casa Gris. "Una vez más garantizamos la gobernabilidad de la provincia", dijo uno de los diputados del PJ que votó a favor.

La sesión en Diputados arrancó a las cuatro de la tarde. Casi cinco horas de debate sin altisonancias. Recién sobre el final, el clima comenzó a recalentarse con algunos cruces y pases de facturas entre los legisladores del PJ. En el hall, donde María Eugenia Bielsa le reprochó en voz alta a Héctor Acuña, su voto a favor. "Vos no podés hacer esto", le dijo.

Ya la semana pasada, el presidente de la Cßmara, Luis Rubeo, había anticipado que el dictamen K iba a tener entre 36 y 37 votos. Sumó 33 votos, entre radicales, socialistas, kirchneristas y macristas. El mayor costo político lo pagó el PJ: los 28 diputados elegidos en 2011 se dividieron en dos fracciones: 13 a favor de la reforma, identificados con Rubeo y Agustín Rossi, y 12 en contra (de los sectores de Bielsa, Jorge Obeid, Omar Perotti y Oscar Martínez), más la abstención del jefe del propio bloque del FpV, Darío Mascioli y la ausencia de su colega Erika Gonnet, que responde al secretario de Transporte de la Nación, Alejandro Ramos. Ahora, habrá que ver si Mascioli y Gonnet siguen en el FpV.

A las nueve de la noche, cuando Diputados votaba los artículos en particular, el Senado pasó a un cuarto intermedio a la espera del dictamen. Y una hora después, Diputados votó otro cuarto intermedio hasta tanto, el Senado aprobara el proyecto.

En Diputados, el debate comenzó con cuatro legisladores del lote que votó a favor: dos del Frente Progresista: Inés Bertero (PS) y Julián Galdeano (UCR) y dos del kirchnerismo: Eduardo Toniolli y Silvia De CÞsaris. "Acompañamos esta reforma tributaria", se justificó Toniolli. Y explicó que "era necesario convertir el aumento indiscriminado de impuestos que proponía el Poder Ejecutivo en una reforma con cierto grado de justicia tributaria".

Galdeano celebró el debate legislativo de estos cinco meses, porque "nos permitió la búsqueda de consenso entre todos aquellos que entendemos la necesidad de mejorar el sistema tributario de la provincia. Estamos satisfechos por lo que se ha sancionado. Apostamos a que sea un punto de partida para nuevos acuerdos", sorprendió el radical.

De Césaris recordó que "siempre fuimos partidarios en dar un tratamiento serio y responsable al proyecto. Estamos convencidos de que se debe avanzar sobre aquellos sectores con mayor capacidad contributiva, como el campo", planteó. El diputado Lacava fue el primer crítico. "El Estado santafesino está sin financiamiento" y "la causa de ese ahogo financiero es el déficit", dijo. Y reprochó a la gestión de Hermes Binner por haber acumulado un rojo fiscal de 3.200 millones de pesos en cuatro años, más los 800 millones de pesos que habrá este año", especuló. "Han gastado mucho y mal", agregó.

Bielsa arrancó con un reproche a sus colegas del PJ que votaron a favor: "No nos eligieron para apoyar el modelo de despilfarro de Binner y Bonfatti". Y criticó al gobierno porque cedió al "facilismo del aumento de impuestos" antes que "plantearse la eficiencia del gasto".

Bielsa dijo que "progresismo es cuidar que nadie tire manteca al techo". En otro pasaje de su discurso, Bielsa advirtió sobre el revalúo de los inmuebles rurales. "Estamos cometiendo una ilegalidad. ¿Saben por qué? Porque hay dos leyes que se pasaron por alto". El dictamen de la Junta de Evaluación no cumple con esa legalidad". Entonces, "si estamos dispuestos a votar una valuación que es ilegal, es muy preocupante".

Qué se votó

* Inmobiliario rural: aumenta la valuación fiscal en un 120 por ciento, que estaba congelada desde 1974. El Senado había propuesto un revalúo del 70 por ciento.

* Inmobiliario urbano: No toca los avalúos. Desgrava las categorías 1 a 4, pero dispone incrementos progresivos a partir de la categoría 5, con un 20 por ciento.

* Ingresos brutos: Grava con el 0,50 por ciento a grandes empresas que facturan mÓs de 80 millones de pesos anuales.

Unidad agraria. Mantiene la unidad agraria que había sido eliminada por la media sanción del Senado.

* Embarcaciones: Crea un impuesto que se repartirá el 90 por ciento entre municipios y comunas y el 10 por ciento para la provincia.