El 75 por ciento de las 900 familias inscriptas en el Registro Unico Provincial de Aspirantes a Guarda con Fines Adoptivos (Ruaga) se inclina por niños de 0 a 5 años. El director del área, Santiago Lemos, reconoció un "déficit" a la hora de encontrar familias para chicos mayores a 8 años, por eso el gobierno provincial se encarga de buscar aspirantes para esa franja etaria. "Buscamos a los interesados que podrían estar en condiciones, tienen que ver muchos aspectos, no únicamente con una cuestión cultural, sino con un montón de situaciones. Hay gente que tiene otros hijos, hay gente sola, es todo un tema", analizó el funcionario. En Rosario y alrededores se concentra el 40 por ciento de los inscriptos en el registro.

Desde la Provincia trabajan la manera de disponer de familias adoptivas para niños y adolescentes. Apuntan al convencimiento, primero para los aspirantes que se encuentran dentro del Ruaga y luego se ponen en contacto con la red nacional "ante cualquier situación particular", aunque hasta ahora no hizo falta. Los pocos casos de estas características pudieron resolverse en el seno de la provincia. El año pasado se realizaron quince talleres de "sensibilización" en toda Santa Fe, cerrados para los aspirantes ya anotados. Lemos asegura que "se logró que algunos hayan modificado su disponibilidad adoptiva". Asimismo, se desarrollaron una serie de cursos con dependencias de la Nación, "que vinieron a formar a nuestro equipo para que podamos multiplicar estos encuentros en la provincia".

El Director Provincial de Niñez, Adolescencia y Familia, Lautaro D'Anna, coincide con Lemos y aporta: "En el imaginario juega muy fuerte la idea de que la población adolescente es muy difícil de ser acompañada. Hay que pensarlo, hay que desdramatizarlo, tenemos que lograr que podamos ser responsables de garantizar, primero, el derecho del niño, niña, adolescente a tener una familia".

En ese sentido, el coordinador del Ruaga pide "romper algunos mitos". Las familias que se inscriben en el registro "son las que manifiestan la edad en la que estarían dispuestos o podrían adoptar". Tres de cada cuatro priorizan la adopción de chicos de entre 0 y 5 años. "En mucha menor medida" aparecen posibilidades para mayores de 8 años. Aunque la convocatoria ﷓-"bastante positiva"-﷓ que se lanzó a fines del pasado aportó 100 nuevas inscripciones de padres dispuestos a adoptar chicos de esa franja.

Lemos subrayó que el año pasado se resolvieron más de 40 situaciones, en el marco del Ruaga. "Eran de las más complicadas, con chicos más grandes o grupos de hermanos", apuntó. Para cualquier caso, el registro comienza a actuar cuando la justicia declara el estado de adoptabilidad. "Cuando todo el proceso administrativo termina, se pide a la justicia el estado y el juez me informa a mí", señala Lemos, quien aguarda el final de la feria judicial para resolver "una o dos" situaciones que quedaron pendientes del 2012.

En los centros urbanos de la provincia, "por una cuestión poblacional", se encuentra la mayor cantidad de aspirantes, pero en "muchas localidades chicas" también hay anotados. "Hasta en Comunas", afirmó.

Previamente al Ruaga, se desarrolla el programa Familias Solidarias, dependiente del área que encabeza D'Anna, que se creó en 2007, se relanzó el año pasado y se desempeña bajo la órbita del Ministerio de Desarrollo Social. "Aparecemos cuando ya no encontramos más margen de ningún tipo para trabajar en términos de revinculación familiar. Las familias solidarias, en el marco de lo temporario, tienen un máximo de un año y medio de tiempo por normas provincial y nacional. Es un programa alternativo a lo institucional, hasta tanto podamos trabajar con familias de origen, ampliada, para que se intente resolver o mejorar la situación que dio origen a la medida, y se decida si ese niño vuelve o no. Tenemos la obligación de hacer lo posible para que ese niño regrese con su familia de origen o encontrar alguien de su familia ampliada que se haga cargo. Si eso no sucede, solicitamos al Poder Judicial que se declare el estado de adoptabilidad".

En Santa Fe hay unas 70 familias solidarias, 40 viven Rosario, más de la mitad. Aunque hay una leve tendencia de ciudadanos de localidades menores por sumarse al programa. D'Anna admite que "es importante la convocatoria permanente", pero lamenta que, en el caso de familias para adolescentes, "todavía no es común".